Misión para siempre {capitulo cincuenta y cinco}



CAPITULO 55

Justin camina hacia la habitación de ______, a pasos temblorosos.

Esta bien, lo aceptaba, jamás pensó en tener un hijo con ella. Era algo demasiado imposible. Pero aun así, amaba a aquel bebe como no tenia idea, era de sabios aceptar los errores, y el ya lo había hecho y aceptaba mas que a nada a ese bebe. 

 Toca a la puerta de la habitación con los nudillos más de dos veces y ella no contesta. Bueno, era obvio después de lo que el había dicho.

Y sin poder esperar, entra a la habitación, donde _____ esta acostada.

El suspira y se sienta en la orilla de la cama, acaricia su pelo y ella se remueve incomoda en la cama.

 Lo mira algo enfadada y después, vuelve a bajar su mirada. El medio sonríe a pesar de la situación. Era preciosa de todas maneras.

— Lo siento cariño —Murmura— Se que.. fue algo cruel lo que dije, pero no sabes como me siento. No quiero poneros en peligro—Ella se levanta de la cama, y se sienta, quedando frente a el

— ¿Y eso justifica que hayas dicho eso? —Pregunta algo cortante. El niega.

— ¿Tu querías tener ese bebe? ¿Tú lo planeaste ______? —Le habla directo. Ella suelta un largo bufido y niega con la cabeza— ¿Entonces? ¿De que te quejas de mis palabras si tu estas en la misma situación? —Pregunta el cruel, ella se deja caer en la cama.

 Aquello la esta destruyendo. ¡Ya ni siquiera sabe que hacer con su vida!

— Lo siento —Es lo único que dice. El niega con la cabeza.

— No tienes que disculparte conmigo. Es al revés —Ella asiente y el le coge las mejillas cuidadosamente— Mira cariño, estamos en una situación horrible y tu mas que nadie lo sabes. No estaba ni en mis planes, ni en los tuyos. Pero eso no significa que ahora mismo yo no lo quiera tener, porque no es así, de verdad quiero.. se que es algo confuso que tu tengas un bebe mío, pero así es. Y te juro que lo voy a cuidar tanto como a ti.

 Ella asiente y lo abraza de golpe, mientras se hecha a llorar. Todo lo que le ha pasado le hace tan débil, que a veces ya no aguanta. ¿Quien mierda quisiera una vida como la de ella? Nadie, absolutamente nadie. Y si pudiera cambiarla lo haría.

— Odio mi vida —Habla ella, separándose unos centímetros de el. Quedando rostro a rostro— No sabes como desearía ser alguien más y no pasar por todo esto. ¡Estoy harta! Me estoy volviendo loca cada segundo que pasa, lo juro. Ya no aguanto, quiero tirarme de un segundo piso Justin, ya no puedo, de verdad.

 El solo suspira dolido. Verla sufrir lo destruía por completo.

— No puedo jurarte que siempre saldrás bien de todo. Porque yo mas que nadie lo se. Pero te juro que hare lo posible para sacarte de todo esto.

 Ella solo asiente y le besa lentamente los labios. Aquellas palabras la hacían sentir mejor.

 Al día siguiente, al menos es mucho mejor. Se relaja, pero aun así.. no puede evitar aquel dolor en el pecho cada vez que piensa es su bebe. Tiene miedo de perderlo.

— Si sigues mirando con esa cara de asco la comida, no te nutrirá —_____ bufa y gira los ojos.

— No importa —Murmura sin ganas, el se deja caer en el sofá.

— ¿Sabias que cuando no le pones ganas a la comida, es malo?

— Si, aja —Le dice sin interés.

— ¿Por qué has estado tan antipática todo el día? Si quieres, ve y desquítate con alguien más, conmigo no —Le dice levantándose el sofá, ella baja su cabeza desesperada.

— Es que.. estoy mal —Confiesa ella, el se para, pero no se gira.

— ¿Y crees que yo tengo la culpa? —Gruñe el, ella niega.

— No.. pero ponte en mi lugar. Tengo que soportar la idea de que quieren matar a mi bebe —Dice ella tristemente. Justin ahora si, se da la vuelta y la mira desde donde se ha quedado parado— Esto es horrible Justin.

— Claro que me pongo en tu lugar. Y créeme yo tengo que soportar cuando te pones así, y no te digo nada porque te amo y no te quiero hacer sentir mal. Tengo que estar pendiente de que comas, de que estés bien. De que no te hagas o te hagan daño. Esto tan bien es difícil para mi, entiéndelo.

 Ella asiente levemente. Ayer y hoy. Habían sido los días, donde Justin le habla así cada vez que pasa algo. Y aunque el también tuviera razón.. no podía seguir así. De verdad.

— Voy a estar en el gimnasio —Dice el, ella asiente y se levanta.

— ¿Puedo ir contigo? —Pide ella, el asiente.

— Vamos —Ella le sigue y los dos entran al gimnasio.

Hace unos días estaba lleno de polvo por la falta de uso, pero Justin había mandando a limpiarlo. Y ahora lucia como todo un gimnasio profesional. Su padre lo había construido hace años, y se tiraba ahí todas las tardes ‘poniéndose más guapo’ como el decía siempre que ella le preguntaba.

 Justin se coloca en uno de los aparatos, sentándose. Mientras con los brazos mueve algunos aparatos. Ella sonríe mirándolo y sin que el se de cuenta se sube encima de el. Justin suelta un gruñido y deja de hacer fuerza. Sus ojos se obscurecen y su pene cobra vida.

— Cariño.. —Gruñe por la excitación. Ella se mueve encima de el y se lame los labios.

 Era tan erótico tener a una nena de 15 años a su disposición, solo para el.

 Justin junta sus labios y le besa con desesperación. La amaba y sin duda le encantaba estar con ella.

— Umm.. ¿Ahora si quieres? —Pregunta ella coqueta, tomando el labio de Justin entre sus dientes.

— Puede que si —Murmura. Y ahueca sus nalgas en sus palmas, _____ suelta un gemido.

— Di que si —Le suplica ella. Extrañaba sentirlo haciéndole el amor. Y aunque hace tiempo habían tenido un problema por eso. Ella sabia que jamás volvería a hacer algo así. Había aprendido su lección por insistir tanto. Y aquello le daba a entender que Justin de verdad la quería, la respetaba. Y eso la hacia sentir mucho mejor.

— ¿Segura? —Le pregunta pasivo, ella asiente— ¿No le hace daño al bebe? —Murmura bajando sus labios a su cuello.

— No le hace daño —Habla ella— El otro día vi en la televisión, que cuando tienen relaciones cuando la mujer esta embarazada, es bueno. Ayuda a la hora del parto —Sonríe pícaramente ______. El niega con la cabeza— Es verdad.. venga vamos a hacer que el bebe nazca bien —Murmura mordiéndole los labios, el sonríe.

— Si tanto insistes —Le dice encogiendo los hombros.

Y empieza a besarle el cuello.

Misión para siempre {capitulo cincuenta y tres y capitulo cincuenta y cuatro}



                                     CAPITULO 53


_____ acaricia de nuevo su vientre plano. Y mira a Justin quien esta entretenido pintando el cuarto que esta al lado del de sus padres color azul. Se había aferrado a tenerlo de ese color, diciendo que su bebe seria un chico, a lo que ella solo negó con la cabeza divertida.

No estaban aun seguros de que seria, y el ya estaba emocionado pitando la habitación.

— Y que al final termine siendo niña. ¡Me burlare demasiado de ti! —Se ríe _____ mirándolo divertida, el deja la brocha de pintar a un lado y la mira.

— No digas tonterías, si yo dije que será niño, es porque será niño —Le dice seguro, ella niega con la cabeza.

— Si tu lo dices —Se encoje de hombros y se sienta de nuevo en el suelo— Esto es raro.. —Murmura ella, a lo que el la mira confuso.

— ¿De que hablas? —Le pregunta, fijando su mirada en ella.

— En que.. tengo 15 y tu 25.. en que tendremos un bebe.. tenemos una vida de telenovela—El ríe.

— Lo se —Admite el.

— Bien, menos hablar y ponte a pintar la habitación de tu bebe ‘chico’ —Le dice con aquel tono burlesco que a usado con el desde que empezó a pintar la habitación.

— Si, si. Lo que digas _____ —Le dice el de mala gana. Y se gira y empienza a pintar de nuevo, a lo que ella ríe.

— ¡Niño pequeño! —El suelta un bufido y ella hace un puchero. Se sube de golpe a su espalda dando un brinco, y el la sostiene de los muslos.

— ¡_____, eres una empalagosa! —Se queja el divertido. Empezando a dar vueltas, para que ella se maree, parecían dos críos.

— ¡Ya Justin! ¡Voy a vomitar encima de ti! —Y el para en seco, la baja con cuidado y ella se tambalea un poco. El le dedica una enorme sonrisa y la abraza.

— Te amo —Le murmura en el oído, ella sonrie y lo abraza aun más fuerte.

— Yo muchísimo mas, como no tienes idea —Se separa un poco de el, y le da un pico en la nariz— Eres perfecto.

— No es cierto, la perfecta eres tu—Le dice acariciándole las caderas, ella oculta su rostro en su cuello.

— Tú siempre lo serás más y te callas —Dice ella con tono amenazador.

— Esta bien, me cayo —Dice algo asustado, ella ríe y se separa de el.

— Así me gusta, que me des la razón —Dice son superioridad, el niega.

— Si preciosa, lo que tú digas—Le guiña el ojo y ella de nuevo vuelve a su lugar y se sienta en el suelo. Una duda llega a su cabeza y lo llama.

— Justin.. —el se gira.

— ¿Qué pasa? —Le contesta.

— ¿Soy diferente en alguna forma? —El frunce el ceño, confuso— Me refiero a que.. si soy diferente en lo físico a alguna chica de tus sueños.

— Pues.. —El se pone a pensar— Hace años hice el prototipo de la chica perfecta. Y realmente, no eres tan diferente —El se encoje en hombros.

— ¿Así? ¿Cómo hiciste el prototipo? —Pregunta curiosa.

— Bueno, siempre me han gustado mas las castañas que las rubias o pelirrojas.. me gusta que su color de piel sea claro, pero no tanto. Me gustan los ojos color verde, me gusta que tengan los ojos grandes, no exageradamente.. que tengan un cuerpo bonito, no tan exagerado. Que tenga una cara tierna —Ella se ríe ante aquello— No te rías, tenia diecisiete años cuando hice el prototipo de mi chica perfecta.

— Ya, perdón, sigue —Le dice ella.

— Bueno, me gusta que sean divertidas y que les guste hacer cosas extremas. No tan extremas como.. lanzarse desde las alturas, porque para eso yo paso.. —Ella ríe— Umm.. creo que es todo.

— Bueno, al parecer en ese entonces eras algo romántico —Le dice ella.

— ¿Acaso ya no lo soy? —Pregunta el.

— Oh, claro que lo eres —Ella ríe.

— Bueno —Contesta el.

— Mierda, no tengo los ojos verdes —Dice ella cabizbaja, Justin sonríe tiernamente y se acerca a ella, se sienta a un lado y le pasa la mano por los hombros.

— Pero tú lo cumples todo, eres realmente el prototipo perfecto. Solo eres un poco pequeñita —Ella sonríe y se oculta en su pecho.

— Tengo suerte de que estés conmigo —Confiesa ella. Y es que así era. ¿Qué niña de quince años se conseguía a un hombre de veinticinco, que la respetara de verdad?

— No, el de la suerte soy yo, por poder conseguir a alguien que valga la pena —Ella se sonroja un poco— Eres demasiado tierna.. me gustan tus ojitos. Son redonditos y rasgados, así como los de los extraterrestres —Ella frunce el ceño y le golpea el hombro— ¡Oye!

— ¡Claro que no tengo ojos de extraterrestre! Aparte, jamás en tu vida has visto uno así que no me compares con esas cosas —El ríe.

— Tal vez jamás los he visto, pero en la televisión salen, enserio tienes los ojos como ellos —Ella gruñe.

— ¡No es cierto Justin! —Se queja ella.

— ¡Que si! —Insiste— Ahora ya no serás lindura, serás ojitos de extraterrestre —Ella hace una mueca y se levanta del suelo.

— ¡Justin pareces un niño! —Le dice—Deja de decir eso, que no es cierto.

— Que si —Dice el seguro.

— No Justin, ya cállate, dices puras tonterías.

— Si tu lo dices —Contesta el y se levanta del suelo, coge de nuevo la brocha y comienza a pintar de nuevo.

— Iré a por fruta—El asiente.

— Bueno, tráeme algo ojitos de extraterrestre —Ella bufa y se va de la habitación algo molesta. Aunque no puede quitar aquella sonrisa de su rostro, cuando el le llama así.

 Bueno a veces pensaba que el niño era el y no ella. Aunque se sentía afortunada de que alguien como el se fijara en ella. Algo realmente extraño. Pero bueno, en estos momentos, la vida de muchas personas era muy diferente a la de los demás. Y no se podía hacer nada.

 _____ se queda minutos hablando con Romina, mientras la mujer le corta algunas frutas en el tablero. Las dos ríen divertidas. Al recordar todas las tonterias que _____ solía hacer cuando tenia doce años.

— ¡Oh vamos, sabes que pensaba que era solo soda de toronja! Yo no tenia ni idea de que era tequila.. —Murmura avergonzada. Romina ríe.

— Eras tan inocente, recuerdo que la escupiste al instante y esta callo sobre el vestido que le regalo tu padre a tu madre —_____ suelta una risa triste.

— Lo se, mamá me castigo como dos semanas.. recuerdo que vendieron mi perrito como venganza —Murmura ella triste, al recordar aquel animalito, el cual tenia desde que tenia cinco años.

— Sabes bien que ni lo cuidabas _____, fue lo mejor para el animal ese —Le dice.

— Pues.. si.. después me compraron una tortuga y se murió.

— ¿Se murió? ¿Qué no la habías pisado? —Le pregunta directa, ____ suelta una risita nerviosa.

— ¡Pero fue un acci…! —Y se calla al escuchar aquel tremendo ruido que proviene desde el patio. Pues al parecer se había roto un cristal— ¿Qué fue eso? —Pregunta asustada a Romina.

— No lo se mi niña.. —Murmura la mujer.

— Iré a ver.. —La mujer asiente y _____ camina hacia la gran puerta de cristal que da hacia el patio, la cual ahora esta hecha miles de pedazos. Ella mira horrorizada la escena. Lo peor del caso es cuando ve una gran roca en el suelo, al parecer esa fue la que lo provoco todo. Asustada se acerca y ve que aquella tiene un papel pegado.

— ¡¿Qué ha pasado?! —Pregunta Justin exaltado mirando todos los cristal en el suelo.

— No.. no se.. —Contesta temerosa, mientras sus ojos empiezan a aguadarse. Que pasaran aquellas cosas le daban demasiado miedo.

 Justin divisa la roca y la recoge del suelo. Mira el papel que tiene y lee horrorizado aquellas cinco simples palabras.

— ¿Qué dice? —Pregunta _____, acercándose a el. El niega.

— Nada.. —Murmura y saca su móvil.

— ¡Quiero saber que dicen! —Pide ella, el niega.

— No ______ —Murmura el, ella niega con la cabeza se acerca a Justin.

— Si tiene que ver conmigo, mas te vale que me dejes verlo —Pide seriamente, y aunque le da pánico lo que dice, tiene que saberlo.

— Es mejor que no lo leas—Ella niega molesta, y las lágrimas le cubren las mejillas.

— ¡Que no _____! —Le grita, desesperado por su exigencia. ¡Dios! Odiaba esta maldita vida para ella.

— ¡Que me lo enseñes, joder! —El suspira molesto y le pone el pelen de golpe en las manos, impulsándola hacia atrás.

— ¡Ahí esta, vamos léelo, arruínate la puta vida! —Ella niega con la cabeza
Y abre aquel papelito que ahora esta hecho bolita.

‘‘Adiós al bebe muy pronto’’.

— No.. no.. el no puede —Murmura y se tapa la boca con las manos. Las lagrimas se hacen mas— ¡No puede hacerle nada al bebe! ¡No me importa, el no le va hacer nada!

 Estalla, tirándose al suelo mientras llora. Sin importarle que los pequeños pedazos de vidrio se claven en sus piernas. Aquello no le duele, le duele lo que el le pueda hacer a su bebe.

CAPITULO 54


Justin le acaricia la melena a _____, después de aquella amenaza se había puesto paranoica. Y el se había puesto demasiado mal. Tal vez si no se hubiera enamorado de ella, no se sentiría así, pero no podía evitarlo, todo lo malo que le pasaba a ella era como una apuñalada al corazón. La quería bien. La quería feliz. Y para lograrlo, tenía que hacer todo su esfuerzo. Y tenia fe en que algún día Gregory pagara todo lo que ha hecho. En la cárcel o en alguno otro lugar. Porque el mas que nadie sabia que todo lo que pasaba en esta vida se regresaba.

— Justin —Murmura ella temblorosa, el se acomoda mejor en la cama y la mira.

— ¿Qué pasa cariño? —Le pregunta, ella suelta un suspiro y se limpia las lágrimas.

 Se incorpora mejor en la cama y se sienta al lado de Justin, el le pasa su fuerte brazo por los hombros y la pega a el.

— Tengo miedo —Confiesa ella.

— Yo tengo mas miedo que tu —Declara el con una sonrisa triste, ella suelta un sollozo y se abraza de nuevo a el.

— Seria horrible que le pasara algo a el bebe —Dice ella— No quiero que le pase nada Justin. El no tiene la culpa de nada.

— Lo se cariño, ni siquiera tú la tienes. Pero veras que tarde o temprano Gregory va estar tras las rejas, pudriéndose el resto de su vida.

— Eso espero.. —Contesta ella— Justin..

— Dime..

— ¿Crees que es correcto empezar a hacer una familia juntos? Digo.. vamos a tener un bebe —El frunce el ceño por el cambio de tema, pero aun así, después sonríe.

— No lo necesitamos hacer.. ya lo somos desde hace mucho tiempo —Ella suelta un suspiro tranquilo. Y le besa los labios, el le responde agusto y empiezan a devorar sus bocas. La termina recostando en la cama y le acaricia las piernas. Después, sin causa alguna ella suelta una risita. Justin se separa y la mira confuso.

— Hey.. ¿De que te ríes? —Le pregunta, ella niega.

— No se.. —Murmura— Hay veces que uno se ríe solo ¿No te ha pasado? —El niega gracioso y ella hace una mueca.

— Estas completamente loca ¿Lo sabes verdad? —Ella asiente levemente y le da un pequeño beso a Justin.

— Tan loca que me enamore de ti —Ella hace una ‘O’ con su boca y el niega con la cabeza divertido.

— Eres tan bipolar, hace unos minutos no parabas de llorar y ahora hasta te ríes sola. ¡Dios mío! ¿Qué has hecho con esta criatura? —Ella pone sus brazos en la cintura y lo empuja.

— ¡Cállate Justin! —Le pide— A veces pienso que soy mas madura yo, que tu.

— Ni lo sueñes preciosa. La inmadura aquí eres tu —Le guiña el ojo, ella lo mira ofendida.

— Me acabas de decir inmadura —Ella finge estar sorprendida— ¡Me has roto el corazón Justin Bieber!

— Has sonado como mi madre —Murmura el— Así me decía.. bueno, me llamaba por mi nombre completo.

 _____ levanta la ceja y se sube encima de el. El gustoso se acomoda y le coge las caderas. Joder, sentir su cuerpo sobre el suyo, lo ponía a mil.

— ¿Cuál es tu nombre completo? —Dice ella.

— Justin Drew Bieber —Le contesta— Siempre que hacia algo malo.. me gritaba.

— Uy —Dice ella, y coqueta con su camisa. El ríe— Drew.. Drew.. suena sexy —Murmura.

— Si lose, todo lo que sale de tus labios lo es —Ella sonríe encantada y besa sus labios.
Ojala su vida fuera así de divertida.

 ****

 Justin la mira divertido y después le besa los labios como loco. Habían estado muy románticos desde aquella noche. Y el lo estaba aun mas, por la simple razón de que quería sacar todos sus sentimientos a flote.

Después de todo, había estado pensando y jamás, le había pedido que fueran ‘novios’ o algo parecido. Por su cabeza habían pasado las ideas de como hacerlo, pero era algo complicado pues _____ aun era una niña, y no sabia muy bien que necesitaba una ‘niña’ para pedirle aquello. Y aunque estaba seguro de que ella aceptaría, quería hacerlo diferente.. o al menos especial.

— ¡Justin! —Exclama Scooter. Ellos dos se separan de golpe y se incorporan en el sofá. Ni siquiera se habían dado cuenta de que el había entrado. Si que se salían de sus mundos cuando estaban juntos.

— ¿Qué pasa? —Pregunta y se pasa la lengua por los labios. _____ coge su mano y se apoya en su hombro, lo mas seguro era que Scooter ya lo supiera.

— Vamos al despacho de Brad, ahora —Gruñe, Justin se levanta, pero _____ lo sigue— Solos.

 Justin asiente y le da un pico a _____ para desaparecer de ahí e ir al despacho.

 Cuando Scooter se ponía así, no era para nada bueno y el más que nadie lo sabia. Pues desde que había llegado a la agencia, se había convertido en su mano derecha a su corta edad.

Los dos entran al despacho y Scooter se sienta frente a el. Justin toma asiento y lo mira determinadamente.

— Supongo que Zac ya te lo dijo —Murmura, Scooter asiente.

— ¡¿Cómo mierda pudiste embarazarla Justin?! —Le pregunta exaltado— ¡¿Estas loco?! ¡¿Crees que esto facilita más esta puta misión?!

— Yo más que nadie se que esto es ahora más difícil. Pero no hay mas que hacer, _____ va tener un bebe y eso no lo puedes impedir —Contesta lo mas calmado que puede.

— ¡Claro que yo no lo voy a impedir! ¡¿Sabes quien lo va impedir?! ¡Gregory! —Justin da un puñetazo a la madera del escritorio, dejándole una abertura.

— ¡El no va tocar a ese bebe! —Grita, molesto.

— ¡¿Y quien lo asegura Justin?! —Le pregunta entre dientes.

— Yo —Contesta seco.

— Aun no puedo entender como pudiste, es una niña Justin. ¡Una niña! —Dice negando con la cabeza.

— ¿Crees que yo quería esto? Jamás en mi puta vida me imagine que ella iba a tener un bebe mío —Confiesa el.

— ¿No quiries tener un hijo mío y tuyo? —Pregunta la voz quebraba de _____ desde atrás. El niega con la cabeza y se acerca a ella, pero ella se hace aun más hacia atrás.

— Claro que si cariño. ¿Por qué preguntas eso? —Murmura el.

— Por lo que acabas de decir.. si de verdad no querías tener un bebe.. me hubieras dicho y hubiéramos ido al doctor para abortarlo.. —Contesta entre sollozos ella, el niega miles de veces.

— ¡No digas estupideces ______! ¡Te amo a ti, y a ese bebe! Lo siento, yo no quería decir que no quería tener ese bebe de verdad.

 Ella asiente débilmente con la cabeza.

— Vale —Murmura— Voy a mi habitación..

 El la ve irse y no hace nada mas que girarse hacia Scooter. Se acerca abatido hacia el.

— Bien.. —Le dice Scooter— Se que esto se ha salido de sus casillas Justin, nadie se imaginaba un bebe de _____ y tuyo. Pero no queda nada más que hacer que protegerlo. Y tu mas que nadie tienes que poner un poco mas de esfuerzo, para que a _____ y al bebe no les pasa nada.

 Justin solo asiente con la cabeza y sonríe tristemente.

— Yo me encargare de que nada le pase a ese bebe. Lo juro —Promete el.

 ¿Pero que pasaba si no podía cumplir aquella promesa? El mas que nadie sabia que era demasiado difícil.