Cαριтυlσ Dιєz al Qυιncє. Maratón 1/6


                     Cαριтυlσ Dιєz. Maratón 1/6
Justin ~
 
 
Estuve llamando a ______ por el resto de la tarde, quería que me acompañase a ver el nuevo departamento, pero no contestó ningunas de mis llamadas ni mis mensajes, intenté no preocuparme por ella, aunque resultase difícil.

 Al final estoy de camino para ver el departamento.

 Esta aproximadamente a quince minutos de mi barrio, y me doy cuenta de que está más cerca del de  _____, así que de momento vamos bien.

 Cuando llego busco donde dejar la moto y le pongo la cadena, me acerco al edificio y veo a un hombre alto de mas o menos cuarenta años fuera.
 
- Disculpa, ¿eres Rodrigo?- le pregunto acercándome-

- Si, ¿Justin?- me pregunta él con voz profunda, podría ser locutor de radio, yo asiento con la cabeza y le doy un apretón de manos- muy bien, vamos - me pide con la cabeza que le siga mientras abre el portal- este es un barrio muy tranquilo- yo miro a mi alrededor y lo noto, asiento con la cabeza esto es justo lo que necesito. Tranquilidad.-

 
Subimos al ascensor mientras él me va explicando algunas cosas que tiene o que no tiene el piso, no le presto mucha atención pues ya lo veré yo mismo.

Cuando llegamos al quinto él se dirige a la puerta que pone una gran C y la abre.

 Entro despacio y lo primero que noto es que es un piso pequeño, mucho más que en el que vivo hasta el momento.

Enseguida al entrar por el corto pasillo veo la cocina, unos cuantos pasos la separan del salón, todo amueblado por suerte y a la derecha la puerta con la habitación en la que hay una televisión plasma.

 Me fijo en que en la habitación se encuentra una puerta que dirige al baño, pequeñito pero limpio al menos.

Esto me resulta más raro de lo que pensé que sería, nunca antes había estado buscando pisos o ese tipo de cosas, cuando dejé de vivir en casa de mi ma… Ana y Charlie estuve unos días en la calle hasta que Martín me dejo quedarme con él y poco después me consiguió el apartamento.

 Así que mucho no se decir sobre este piso, a simple vista parece estar bien para mí que estaré solo aquí y encima es bastante económico, menos de 5OO € al mes, pero realmente me gustaría tener una opinión. Más concretamente la opinión de ____.

- Como ves es un piso perfecto para un chico como tú, vivirás solo, sin molestos vecinos y muy barato- dice el hombre acariciándose el bigote-

- Si, parece estar muy bien- digo haciendo una mueca inconscientemente-

- Hombre, si de vez en cuando te traes a una chica no pasa nada eh, siempre y cuando no rompas nada, como la cama- dice bromeando y yo río- ¿tienes novia?

- Si, y de hecho me gustaría que ella lo viese antes de decidir. ¿No le importaría que viniéramos mañana?

- Esta bien, entiendo, estoy casado, y si no le pides opinión a tu mujer hasta para la corbata enseguida se ofenden. - él ríe a carcajadas y me contagia su risa-

- Entonces ¿mañana a la misma hora?

- Si te viene bien prefiero por la tarde, que será mi día libre .

- Me parece bien.

Después de medir unos cuantas palabras más me marcho de allí, al llegar a casa, como de costumbre me preparo un porro, después de fumármelo llamo a _______ que esta vez por fin me contesta.
 
- Hola mi amor- canturreo más contento por el porro, ella suelta un risita tonta que me llena de ternura-

- Pensé que estabas enfadado.

- Imposible enfadarse contigo por mucho tiempo.

- Lo se- bromea y río con ella- Justin… sé que esto será incomodo pero necesito que me hagas un favor.

- Claro, dímelo. Por mi pececito lo que sea- digo bromeando pero en serio al mismo tiempo.-
 



                  Cαριтυlσ Oиcє. Maratón 2/6

______ ~
 
 
Me hubiese gustado no tener que hacerlo. Pero Justin era mi única opción. Le prometí a mi madre que la ayudaría a conseguir el dinero y lo haría, no podía dejarla sola con este lío. Así preferí decirle a Justin de hablarlo en persona, al día siguiente, así que aquí estoy.
 
- ¿Vas a hablar o te saco las palabras con cucharitas?- dice bromeando Justin sentando frente a mí-

- Esto es muy incomodo… quizás no debería, ¿sabes qué? Déjalo- digo poniéndome de pie dispuesta a irme, él me toma por la cintura y me arrastra a su lado-

- Dime de que se trata, puede que sea más fácil de lo que piensas.

- Es que Justin, creo que no esta bien pedírtelo- digo arrepentida-

- Vamos, nena, dímelo. Puedes pedirme lo que sea de verdad - hace que me de la vuelta todavía rodeándome y me mira sonriendo, yo me muerdo el labio inferior - que sexy- susurra con voz ronca y me muerde el cuello-

- Así menos te lo diré- Digo en forma de queja, él se separa un poco de mi y me incita a seguir hablando- es que… estoy teniendo muchos problemas, Justin. - digo suspirando y me siento en el sofá, él enseguida me sigue y me mira preocupado- después de la muerte de mi padre… - tomo aire- las cosas en casa empeoraron, ya no recibimos el paro y no tenemos nada- digo con la voz en hilo- y…

- ¿Cuánto necesitas?- me pregunta él sin dejarme terminar-

- ¿De verdad estas dispuesto a dármelo?- él asiente-

- Te dije que por mi pececito lo que sea ¿no?- me dice con una sonrisa, yo le pego en el hombro-

- No soy un pez- digo intentando no sonreír-

- Bueeeeno…- dice alargando la e, y rodando los ojos yo río con él-

- ¿De verdad, Justin? Mira que si no puedes… yo sé que ganas bien en ese trabajo tuyo, porque bueno… ya sabes, pero supongo que es para tus cosas y eso.

- Si no pudiera darte nada te lo diría. Mira, entiendo por lo que estas pasando, y yo estoy aquí para ti y tu familia. No soy rico, ni de cerca, pero tengo un dinero ahorrado- dice encogiéndose de hombros-

- ¿Dinero ahorrado? Joder, entonces no- digo negándome- si lo ahorraste fue por algo.

- Si, lo ahorré para cuando surgiera un problema como este, aunque no me este pasando a mí tiene que ver contigo.
 
Yo me muerdo el labio insegura, había venido muy decidida a pedirle algo de ayuda a Justin, pero cuando ha llegado el momento mi valentía se fue así como vino. Siento como si me estuviese aprovechando de él porque me quiere.
 
- No te estas aprovechando de mí- dice y le miro sorprendida por que es justo lo que pensaba- más bien yo de ti, porque me los cobraré.

- ¿Qué?

- Me tendrás que pagar- dice acercándose a mi- dejando que te haga cositas- susurra en mi oído y muerde mi lóbulo-

- ¡Justin!- le grito riendo y le pego en el hombro-

- ¿Qué? - dice fingiendo inocencia y me sienta en sus piernas- me alegra que me lo pidieses a mí, tenme confianza. Mira… no es que tenga mucho dinero. Pero, aparte del que he ahorrado y he conseguido en mis.. negocios, tengo uno que te pertenece. - le miro confusa ¿de que habla?- Te dije que había vendido el coche que me gané … bueno, ya sabes- yo asiento y le acaricio la mejilla dejándole ver que eso es pasado- conseguí unos 5.OOO€ por él- le miro sorprendida- no he gastado ni la mitad, lo que he gastado ha sido en ti, ya sabes con lo de tu padre y las flores. Bueno, desde el principio tenía claro que ese dinero lo gastaría en ti o haciendo cosas contigo. Quedan unos 3.5OO€ o poco más. Y aunque lo quería gastar en algo más especial, tú lo necesitas para esto que es mucho más importante. Así que dispones de él, ¿entendido?

- Justin… - susurro-

Se me salen algunas lagrimas, no me puedo creer que Justin este haciendo esto por mi. Que haya devuelto ese maldito coche y que ese dinero, aunque venga de algo que estuvo mal, él lo este convirtiendo en algo bueno. Que este dispuesto a darme todo ese dinero dice mucho de él. Quien hubiese dicho meses atrás, cuando él no soportaba escuchar mi voz chillona como solía decir en clases, ¿me terminaría ayudando tanto?. Me terminaría enamorando tanto, aunque estoy segura que no tiene nada que ver con el dinero.
 
- No se ni que decir.

- Di que me quieres- me susurra mirándome a los ojos, yo me quedo callada sorprendida por ello, él parece decepcionado - o nada, también es una buena opción.

 
Justin se queda cabizbajo y me enternece tanto que me dan ganas de comérmelo con patatas fritas.

 Le rodeo con mis brazos por el cuello y le doy un sonoro beso en el cuello. Y le susurro un “Te quiero” él más sincero que he dicho nunca, lo siento sonreír, levanto la cabeza y le beso suavemente, disfrutando del momento, él me rodea por la cintura atrayéndome más hacia él y me sigue el beso con el mismo amor y pasión.
 
- Te amo- susurra y miles de fuegos artificiales saltan dentro de mí.-
 


                  Cαριтυlσ Docє. Maratón 3/6
Justin ~
 
 
Te amo. Se lo dije. Nunca antes lo había hecho, y se siente… bien. Jodidamente bien poder decirlo. Y mucho mejor cuando eres correspondido y ella susurra un “Yo también te amo”. Es como poder volar, saborear el cielo. Es la mejor sensación que jamás he llegado a experimentar antes.

 Y estoy tan seguro de ello, todos los sentimientos que siento por ella, que no he dudado en llevarla hasta la cama y hacerle amor. Una, dos, tres veces. Cuantas veces sean, para dejarla marcada como mía, para demostrarle que de verdad es lo más importante para mi.

 Y se siente tan bien, no tengo ningún miedo, nada de eso, no hay miedo de amar, de entregar todo. De arriesgar todo. Y por ella.
 
Le acaricio la mejilla mientras la veo dormir, noto sus orejas, eso me molesta, como me gustaría quitarle todas esas preocupaciones de encima, pero incluso yo tengo mis propios problemas sin resolver, aún así estaré para ella.

______ despierta con una sonrisa y me gusta saber que es por mí.
 
- ¿Qué hora es?- es lo primero que me pregunta-

- Es temprano, las cuatro. Lo que me recuerda que a las seis quede de verme con Rodrigo.

- ¿Rodrigo?

- Si. No te lo había dicho pero me mudaré de aquí, así que ayer quede con un chico, le dije de volver a ver el piso hoy porque quiero que vengas conmigo- digo lo más tierno que puedo, ella me sonríe-

- Esta bien. ¿Y porque te mudas?- yo enmudezco enseguida y me tenso, ella lo nota y hace un mueca- si no quieres contármelo…

- No es eso, es que…

Me interrumpo por el móvil que comienza a sonar de forma tan fuerte que hace dar un respingón a ______, yo me burlo de ella y le pido que me lo pase, pues esta más cerca de ella, cuando veo la pantalla me tenso todavía más y lo apago.

 Es Ana.

 ______ se da cuenta, incluso ha visto el nombre en la pantalla pero no me dice nada, recuerdo que la última vez que me pregunto sobre mis asuntos las cosas terminaron mal, pero ahora no será así.
 - ¿No me vas a preguntar?- le digo intentando sonar relajado-

- He entendido que tiene que salir de ti, yo no pienso pedirte que me lo cuentes si no estas preparado para ello…

- Lo estoy- la interrumpo mirando al frente, la miro y le doy un pico en los labios antes de comenzar a hablar- Ana… es mi madre. Aunque hace mucho tiempo le quite ese título, por como se ha comportado conmigo. Cuando vivíamos en Barcelona las cosas iban bien hasta que perdió el trabajo, Charlie… ese sujeto que llame padre, cambió por completo, por sus idioteces termino perdiendo el trabajo, cosa de la cual culpaba a mi madre. Es un cobarde, un poco hombre- digo llena de rabia- nos mudamos a Madrid cuando yo tenía unos 15 años y en realidad fue hay cuando comenzó la tortura.-

<< Mi madre consiguió un trabajo gracias a Martín, su hermano, Charlie se sentía frustrado porque él no hacía nada durante el día, así que comenzó a pagarlo con mi madre y en ocasiones conmigo. Pronto paso de los insultos a las amenazas y de las amenazas a los golpes. Yo estaba lleno de rabia, solo tenía 15 años y huía de casa, me pasaba el día en calle porque no quería ver como la golpeaba y yo no podía hacer nada. >>
 
<< Le pedí a mi madre muchas veces que le dejará, que nos largásemos, no entendía porque no lo hacía, ella trabajaba, podía largarse, o denunciarle, pero ella decía que él cambiaría, que eso pronto cambiaría, que no me metiera en eso que eran cosas de mayores que no entendía. Pero lo entendía. Mi madre era victima de él, de sus manipulaciones. Muchas veces me enfrente a mi padre, pero mi madre siempre terminaba por ponerse de su lado, y eso me enfadaba tanto, me irritaba, comencé a juntarme con gente que no debía, a fumar, me hice amigo de pandilleros, aunque nunca me metí en bandas tenía buena relación con ellos. Y así pasaron los meses, mi cumpleaños recuerdo que lo pase borracho en un parque>>
 
<< Una tarde me harte de los gritos, de los platos rotos, del llanto de mi madre así que termine por darle una paliza a mi padre. ¿Y sabes lo que hizo Ana? Me echo de casa porque él se lo pidió, él la chantajeo, la manipulo, y ella lo prefirió a él. Me echo como a un perro. ¿Sabes lo que duele que tu madre te abandone a tu suerte con 16 años? La odié. Fue entonces cuando conocí a Roberto, él me dejo meterme en su casa unos días aprovechando que sus padres no estaban, cuando volvieron me dejaron unos días en su casa, pensar que gente que no me conocía me apoyaba más que mi madre. Eso fue duro>>.

<< Ana me volvió a buscar, me pidió perdón y me dijo que volviera, que las cosas serían diferentes. Le creía. Pero me equivoque. No había pasado ni una semana cuando los gritos volvían a despertarme en la noche, los llantos de mi madre, toda la mierda de antes. Esa misma noche tuve uno de los peores enfrentamientos con Charlie. Fue tan grande que los vecinos, que hasta el momento se habían mantenido al margen llamaron a la policía. Cuando llegaron pensé que por fin la pesadilla había acabado. Pero Charlie dijo que yo era un delincuente, dijo que no entendía como había tenido un hijo como yo, soltó unas cuantas lagrimas de cocodrilo. Y Ana le apoyó. Le di la razón, me llevaron a un correccional. Allí estuve un año. Cuando me dijeron que me iba me sorprendí. Ana había ido a por mí, yo hice creer que estaba de acuerdo, feliz por volver a casa, pero en cuanto salí de ese infierno me di la vuelta sin escucharla>>
 
<< Me decía que la perdonase, pero me resultó imposible. Fue entonces cuando Martín llegó a mi vida. Yo le conocía, pues es el hermano de mi madre, pero nunca tuve una gran unión con él ni nada de eso, pero cuando me ofreció una casa le dije que sí, al principio pensé que era obra de mi madre, que se lo pidió, pero él me hizo ver en poco tiempo que no, que tenía interés en mi. Él era un narco, recién comenzando por así decirlo, yo solo tenía 17 años así que fue fácil que me vendiera. Que aceptará todo lo que me ofrecía, fiesta, dineros… chicas. Así que en los dos últimos años he estado trabajando para él e ignorando a mi madre. Pero hace unos pocos días decidí dejar los negocios con Martín, para él esto es una traición, pero tengo claro que ya no quiero eso en mi vida. Resulta difícil salir de esto, casi imposible. Pero lo haré. Es por esa razón que me mudo de aquí, este departamento le pertenece y puede venir a por mí en cualquier momento>>.
 
Cuando termino mi relato miro a ______, incluso por un momento ni la sentí allí, ella me mira alucinada, no se si habrá sido demasiada información que procesar en tan poco tiempo, pero sentía la necesidad de abrirme con ella, de contarle mi historia.
 
- Vaya…

- Si- digo y río intento quitar hielo al asunto-

- No sabes cuanto siento todo lo que has pasado, no te merecías eso.

- Lo se, pero así es la vida - digo encogiéndome de hombros y reprimo las ganas de llorar, ella me abraza y siento sus lagrimas en mi hombro- no llores, amor.

- Es que pensar que hayas pasado por todo eso, joder Justin. Me hace ver que esta vida es una mierda.

- No digas eso, también hay cosas buenas.

- ¿Ah si? ¿Cuáles?- pregunta rodando los ojos-

- Pues por ejemplo, tú. - susurro lo ultimo y le doy un beso que me gustaría nunca termine-

- Gracias- me susurra-

- ¿Por qué?

- Por habérmelo contado, por confiar en mí, seguro te costó y…

- No me costó nada, de hecho me gustó. Necesitaba desahogarme, necesitaba contártelo y que supieras con quien estas. _______, mi vida no es fácil aunque a veces lo parezca, hay mucha mierda. Me metí en esos negocios de droga, de asaltos, de amenazas y chantajes a quienes no hacen lo que tú quieres. Como te he dicho, Martín considera que le he traicionado y seguro vendrá a joderme.

- Yo no dejaré que te haga nada- dice rodeándome por la cintura con sus brazos-

- No lo entiendes. No solo vendrá a por mi, también a por las personas que me importan, esa es su manera de trabajar.

- ¿Y? Justin, no soy una niña, yo también he pasado y estoy pasando por mucho, no me voy a asustar. Te quiero y estaré contigo así se interponga Martín o el Papa. Me importa una mierda.

- _____ …

- Además- dice silenciándome poniendo un dedo en mis labios- tu eres un tiburón ¿no? Sabrás cuidar de tu pececita- dice con una sonrisa traviesa. Y sí, lo haría.


                  Cαριтυlσ Tяєcє. Maratón 4/6 

______ ~
 
 
- ¡Pero mama! ¿Por qué no?- pregunto irritada-

- Porque no quiero dinero regalado de otro, __*, entiéndelo. Tú eres grande, deberías saber que nadie da tanto dinero por caridad, menos un chico tan joven como él, algo tiene que a ver detrás…

- ¿Algo como qué?- digo a la defensiva- te recuerdo que él pago la mitad del ataúd de papa y hasta el momento no nos ha sacado nada en cara, de hecho se esta portando incluso mejor, mama. Justin no tiene ninguna razón oculta, lo único que quiere es ayudarme.

- Exactamente porque ya ha ayudado demasiado no quiero su dinero. Además, ¿Qué te crees? ¿Qué soy gilipollas? Un chico como él no puede tener tanto dinero así porque sí a menos que no venga de una cuna de oro. Ese niño anda en cosas raras y tú lo sabes y lo aceptas.

- Si, lo acepto porque yo no estoy con él por su trabajo, estoy con él porque le quiero.

- O sea, que aceptas que él…

- Mira, mama- digo interrumpiéndola- puede que antes Justin haya estado mezclado en cosas ilegales, pero ya no, él cambió. Quiere tu respeto, se ganó mi amor y yo sé que tengo el suyo. Así dime, ¿Cuál es el puto problema?- le grito-

Estoy harta de la discusión, después de acompañar a Justin a ver el pequeño departamento en el que se mudará ahora, corrí a casa para decirle a mi madre que conseguí el dinero necesario para pagar todo, no cogí todo el que Justin me ofrecía, me hubiera sentido peor, solo saque cuentas y deje que me diera justamente el necesario para pagar todo y comprar comida, así que no entiendo que le ve ella de malo a que al menos durante este mes, nuestros problemas se resuelvan.
 
- El problema, es que no esta bien aceptar dinero de los hombres que no son nada tuyo.

- Eso me parece bien, pero Justin sí es algo mío. - digo entre dientes cabreada. Ella suspira profundamente y se sienta en el sofá-

- _______ compréndelo, no negaré que eso nos resolvería los problemas este mes, que puede que sea un acto de buena intención que hace ese chico porque te quiere, pero eso no me quita de la cabeza de donde viene ese dinero.

- Pero mama…

- Además, ¿Qué pasará el mes siguiente? ¿De nuevo vas a ir a pedirle dinero? No podemos estar así todo el tiempo, cariño. Quiero que lo entiendas. Ahora no tenemos a papa aquí para levantarnos el ánimo, ahora tenemos que velar por nosotras y por nuestro bien. Y yo soy una mujer madura, ___* no puedo depender del dinero que te de tu novio. No podemos vivir así.

Me quedo en silencio. Quizás no lo había visto desde ese punto de vista, pero en cualquier caso, ¿Qué pretende que hagamos? ¿Qué nos vayamos bajo un puente? Yo solo había pensando que durante estos días al menos estaríamos bien y nos centraríamos en buscar un trabajo.
 
- Yo había pensando en que busquemos trabajo- susurro-

- ¡Claro! Como los trabajos abundan últimamente- dice llena de sarcasmos- ¿te recuerdo que eres menor de edad?

- ¿Y? No falta mucho para mi mayoría, además ¿Cuánta gente no trabaja? A partir de los 16 y con tu permiso podría conseguir uno.

- ¿Y que te hace pensar que te lo daría? Tu padre no quería que trabajes hasta ser mayor de edad- sentencia -

- ¡¿Y que más da?!- grito enfadada- si papa no esta aquí para verlo- sigo en grito.-

Pero paro en seco al sentir, por segunda vez en menos de una semana, su mano con fuerza sobre mi mejilla, esta vez mucho más fuerte que antes que hace que me tambalee, siento las lagrimas bajar por mis mejillas una de ellas ardiendo y sé que esta roja con la marca de su mano.

- ___*… - comienza a decir, pero no la dejo terminar, pues salgo corriendo de allí. Lo último que quiero es escuchar como se lamenta, ¿esto sería así a partir de ahora?


              Cαριтυlσ Cαтσяcє. Maraton 5/6
Justin ~
 
 
Escucho el timbre sonar con insistencia, pienso por un momento que se trata de los matones de Martín, así que cojo la pistola de la que siempre me he asegurado no tener que usar contra alguien, pero si lo tengo que hacer esta noche estoy listo.

Escucho ahora como tocan la puerta, me acerco con cautela y me asomo a la mirilla de la puerta, bajo la guarda al ver que se trata de ______ y le abro enseguida al notarla tan afligida.
 
- Justin- pronuncia mi nombre con la voz en un hilo y se lanza a abrazarme, aparto la pistola de ella rápidamente e intento que no la vea, pero ya es tarde pues la mira sorprendida y después a mí.-

- Pasa- digo cerrando la puerta, dejo el arma encima de un mesita y me siento a su lado- no es lo que piensas.

- ¿Y que se supone que pienso?

- Que si tengo un arma es porque suelo usarla o algo así. Cuando trabaje para Martín él me entrego una para que me cuidase, pero nunca he tenido que usarla. Solo la conservo por mi seguridad.

- Esta bien- dice algo insegura- ¿estabas ocupado?- pregunta mirando a su alrededor, pues esta todo echo un desorden-

- Estoy viendo lo que me llevo, mañana me entrega las llaves del nuevo departamento y puedo ir cuando quiera. Cuanto antes, mejor- ella solo asiente con la cabeza- ¿Qué ha pasado? ¿Por qué esa cara?- le pregunto con una ternura que no sabía existía en mí, ella hace un puchero adorable y me dan ganas de comérmela a besos-

- He peleado con mi madre, no entiendo que le pasa. Esta actuando tan extraño, no quiere aceptar el dinero que tú me diste y aunque por un lado lo comprendo… ¿Qué pretende que hagamos si no?

- Me temía que pasase, si quieres vamos y hablamos con ella los dos y…

- No, no merece la pena. Ella esta decidida, pero ¿sabes qué? Que haga lo que quiera, no me importa. Yo estoy intentando ayudar, seguir adelante, pero ella parece seguir queriendo vivir en el pasado, con el fantasma de papa encima de nosotras. Ella no entiende que él se fue y…- a ella se le corta la voz por las lagrimas y yo no sé hacer otra cosa mejor que estrecharla entre mis brazos-

- Cariño, cada uno lleva su dolor como puede, lo supera cuando es el momento, cuando se sienten listos. Que tu estés aprendiendo a vivir solo con su recuerdo y que quieras seguir adelante no quiere decir que ella tenga que ir igual. Ella va a un ritmo diferente al tuyo.

- No lo había visto así- dice mordiéndose el labio- pero como quiera, no tiene que pagar su frustración conmigo, lo que necesitamos es unirnos más, es ayudarnos, no estar peleando - se seca las lagrimas y rueda los ojos-

- Lo se, pero dale su tiempo- ella me mira atenta en silencio un buen rato- ¿Qué pasa?

- ¿Dónde escondías tanta madurez? - dice sonriendo- quien me iba a decir que tú estarías dándome consejos y consolándome-

- Pues ya ves- digo sonriendo travieso- soy una caja de sorpresas. He pasado mucho así que aunque no lo parezca, he madurado a punta de palos- digo haciendo una mueca-

- Mejor no pensemos en cosas tristes- dice secando sus lagrimas y luego acariciando mi mejilla-

- Esta noche hay una fiesta- suelto de repente, ella me mira confusa- puede que no quieras ir, es pronto y todo eso… pero yo creo que nos vendría bien a los dos, despejarnos de todo un rato. Y ya mañana yo mismo te acompaño a hablar con tu madre. ¿Qué te parece?

- No lo se- dice haciendo una mueca- tendría que avisar a mi madre de que dormiré fuera para evitar más peleas.

- Pues llámala- digo pasándole mi móvil-

- Es que Justin ni siquiera tengo la ropa adecuada- yo la miro de arriba bajo, unos shorts blancos con una camiseta con un poco de escote en negro y unas sandalias en negro también- pues yo te veo bastante bien. - ella rueda los ojos- tu siempre estas guapa, lo sabes. Además… tampoco es una gran fiesta, es más bien un botellón, sabes que ahí vas como quieras- le digo, ella parece pensarlo un momento y asiente-

- Esta bien, pero deja que me haga algo en el pelo.- yo ruedo los ojos temiéndome todo lo que tardara- será rápido, no pongas esa cara - me reclama sonriendo- gracias cariño- susurra cerca de mis labios y sale corriendo al baño. Me tiro en el sofá resoplando. Esta niña sería mi perdición. Pero aún así, es mi niña.-
 

                          Cαριтυlσ Qυιncє. Maratón 6/6

______ ~
 
 
Llamé a mi madre para avisarle de que no dormiría esta noche en casa, ella se quedó callada unos segundos y al final me soltó un grosero “haz lo que quieras” yo le respondí con un “esta bien, así será” porque ella tenía claro que aunque no me hubiese dejado, yo lo hubiera hecho.

 No se en que momento mi relación con mi madre paso de “oh bebita, ¿y donde te quedaras a dormir? Sabes que no me gusta que duermas fuera de casa” a un “haz lo que quieras”. Pero ha sucedido. Y no quiero pensar en ello.
 
Solo quiero despejarme y olvidar por un rato mi miserable vida.

Creo que me merezco divertirme un poco esta noche, a pesar de sentir una leve culpabilidad porque solo ha pasado un mes y medio de la muerte de mi padre.

 Pero esto es algo que deseo hacer, además que no podía decirle que no a Justin, después de todo él también se merece diversión y no es justo que por mi se tenga que quedar esta noche encerrado conmigo.
 
Me termino por meter a la ducha y me lavo el pelo, consiente de que me pondré la misma ropa que tenía antes, me asomo a la puerta y veo a Justin viendo la tele distraído así que corriendo voy desnuda hasta su habitación para buscar unas bragas que estoy segura, he dejado en este casa, pero entonces siento sus manos en mi cintura y como me apretuja contra él haciéndome sentir su ya erecto pene.

 Me sonrojo cuando lo escucho ronronear mientras me acaricia mi entrepierna provocándome leves gemidos.
 
- Si quieras nos quedamos y…

- No- le interrumpo separándome de él dándome media vuelta para mirarle- ya parecemos dos ninfomanos- digo riendo-

- ¿Y? ¿Qué quieres que le haga?- dice atrayéndome hacia él y envolviéndome con sus brazos- si soy adicto a ti- susurra contra mis labios antes de robarme un beso-

- Ya, Biebs, mejor búscame unas bragas.

- ¿De donde quieres que saque unas?

- Estoy segura que alguna mía habrá en tus cajones- digo asomándome a buscarlas, pero él me impide dar un paso más tomándome de las manos-

- Bien dijiste, mis cajones. Así que mis bragas- yo río- hablo en serio, eh.

- ¿Y las usas mucho?- digo burlona-

- Hum, no sabes cuanto, cada noche me la envuelvo en la mano y me imagino que…

- ¡Justin! - le grito sonrojándome y le pego en el hombro, él suelta una sonora carcajada, va hasta sus cajones y rebusca hasta encontrándomelas - ten, anda. Pero me las devuelves- dice amenazante con el dedo, yo le saco la lengua y me voy corriendo al baño sintiendo su mirada en mi culo.

Luego de cambiarme y hacerme lo mejor que pude en el pelo totalmente rizado, salgo del baño y me encuentro con Justin ya listo, me da un pico antes de salir conmigo detrás, esta vez no usará su moto, pues tiene miedo de cogerse el pedo del siglo y después usarla, así que iremos en autobús.

 Cuando a los 10 minutos este llega, Justin paga nuestros billetes y nos vamos a la parte de atrás, ya que nos quedamos en la última parada, él me va acariciando mi muslo descubierto y deposita suaves besos en mi cuello la mayor parte de tiempo, con la mirada de desaprobación de las señoras y las curiosas e incomodas de otros más jóvenes, nunca he sido de ir besándome en publico, pero con Justin es inevitable. Hasta que suena mi móvil y nos rompe el momento. Miro la pantalla y sonrío inevitablemente.

- Hola Lore- digo contenta-

- Niña, hasta que nos coges el teléfono, eso no se hace ¿sabes?- me dice quien estoy segura es Mónica-

- Es que si… ya te vale- habla ahora Marta yo río mientras Justin sonríe negando con la cabeza y se despega un poco de mí para darme espacio de hablar con ellas-

- Ey ya, ¿quién esta gastando su saldo? ¡Yo! Así que déjenme hablar- dice fingiendo molestia Lorena, yo sonrío divertida-

- Chicas, ¿Cómo están?- dice -

- Bien, pero te hemos llamado cientos de veces y tu ni caso, ¿para qué tienes móvil?- me reprocha Mónica-

- Pero… ¡que he dicho que hablo yo!- grita como una niña pequeña Lorena provocando nuestras risas, incluso las de Justin que esta escuchando, pues esta en Altavoz-

- Te echamos de menos, no es lo mismo sin ti, pero bueno, tú nos tienes abandonadas desde hace tiempo- dice Lorena y me las imagino haciendo pucheros a todas -

- ¡Claro que no!

- Si, pero que nos vas a necesitar si tienes a Bieber…- yo le miro y me sonrojo al escuchar sus “Uy… “-

- Si, tiene a su papi- dice Mónica riendo-

- Ese que le da candela- dice ahora Marta-

- ¡Ya cállense!- miro a Justin que intenta fingir no enterarse pero su sonrisa le delata- ¿Cómo os enterasteis que volvimos?

- Pues, aunque no creas el mundo esta muy avanzado y existe la tecnología, redes sociales, ya sabes, Tuenti, Facebook, Twitter, MSN…

- Si, si - digo rodando los ojos-

- Y nosotras tenemos agregado al Facebook a tu bombón, así que… inevitable no enterarse, tú deberías actualizar el tuyo ¿sabes? Lo tienes muy descuidado, y en el Twitter hasta te ha dejado de seguir gente…

- ¿Enserio crees que me importa?- digo rodando los ojos-

- Solo decía- dice Lorena y me la imagino encogiéndose, yo río-

- ¿Qué habéis hecho?

- Pues playa, piscina y playa. Y ver muchos bombones- dice y todas se echan a reír - ¿y tu? ¿Cómo esta todo por allí?- yo hago una mueca-

- Va bien.

- ¿Segura?- pregunta Marta-

- Si. Ya os dije que no os preocupes por mí.

- Si chicas, además, aquí esta su papi que le da candela ¿no?- dice bromeando Justin al teléfono y se echa a reír al igual que las chicas, yo me sonrojo como un tomate-

- ¿Estabas escuchando?- pregunta Lorena y noto su timidez-

- Algo escuche- dice entre risas-

- ¡Que vergüenza!- exclama Mónica-

- Ay no, que fuerte- dice dramatizando Marta, yo me echo a reír-

- Ya no hagan drama- digo riendo- chicas… tengo que colgar- digo asiendo una mueca pues me hubiera seguir hablando con ellas, pero veo que Justin presiona el botón para indicar que la próxima es nuestra parada- luego hablamos.

- Esta bien, luego te llamamos ¡o llama tu, eh! Te queremos, adiós.

- Yo a vosotras- y colgamos las dos-


Bajamos del bus pasando por alto cuando casi me como el suelo cuando este dio un fuerte frenazo, si no hubiese sido por Justin que me coge por la cintura ahora estaría sin dientes.

 En dos minutos nos adentramos en parque y ya siento la música y el ruido de todo el mundo hablando a la vez.

Me pongo un poco nerviosa y me dan ganas de devolverme, pero parece que Justin me lee la mente pues me toma la mano obligándome a avanzar.

 Nos vamos a acercando y siento la mirada de algunos, otros saludan a Justin y no puedo evitar que vengan a mí los recuerdos de aquella vez que me trajo y me dejó sola la mayor parte del tiempo, le miro y él me guiña un ojo, mis nervios aflojan un poco: esta vez es diferente. Ahora él es mí novio. Y sé que no me dejará sola con todos estos locos borrachos y fumados. Solo espero que la noche vaya bien.

Cαριтυlσ Ochσ y Cαριтυlσ Nυєvє.


                                 Cαριтυlσ Ochσ.

Justin ~


- Entonces, ¿es cierto?- me pregunta Roberto mientras se lleva la lata de cerveza a la boca y da un largo trago-

- Si, es muy cierto. - digo dando una calada al porro-

- ¿Sabes lo que estas haciendo?

- Lo se. ¿Y sabes? Tu deberías hacer lo mismo. Dejarlo antes de que sea tarde.

- No lo entiendes, Justin- dice negando con la cabeza- nunca se es tarde ni pronto. Cuando entras en esto no sales nunca.

- Eso es mentira. Hay mucha gente que ha logrado salir. ¿Por qué yo no?

- Porque Martín es el doble de listo que tú. Sabes que tu solo no podrás contra él.

- Eso es lo que tú te piensas, y lo que él cree también… que soy débil, pero ¿sabes qué? Os callaré la boca a los dos.

- No digo que seas débil. Pero si comparamos que Martín se esta convirtiendo en uno grande en el mundo del narco, que tiene a mucha gente trabajando para él y te miramos a ti, que no tienes nada… no hay que ser muy listos, Justin. Te hará pedazos.

En el fondo sé que tiene algo de razón. Martín podría acabar conmigo si no espabilo. Él podría fácilmente mandar a uno de sus matones y pegarme un tiro. Simple y sencillo. Pero yo no soy ningún idiota, sé como suele trabajar Martín, y no caeré en sus trampas, sus amenazas, sus sucios chantajes. Yo seré más listo.
 
- No pasara- me limito a decir, tiro la colilla al suelo y me levanto para subirme a mi moto-

- Justin… tienes que tener cuidado, sabes que él juega sucio. - me dice desde su silla en aquella terraza-

- No te preocupes por mi.- enciendo la moto pero Roberto vuelve a hablar-

- Mira, no me voy a meter en nada de esto. Eres mi mejor amigo pero trabajo para él. Aunque eso no quiere decir que si necesitas mi ayuda, si me entero de algo que planee en tu contra no te lo diría, al contrario.

- Gracias Roberto- digo con una sonrisa a medias y arranco en la moto.-

Tengo claro que lo primero que tengo que hacer es irme del que hasta ahora ha sido mi departamento, en realidad es propiedad de Martín, por lo tanto él en cualquier momento me echará de aquí o peor aún, puede mandar a vigilarme o darme un “sustito” de lo que me puede pasar como siga con mi idea de lo que él considera una traición.

 Así que en cuanto entro al departamento comienzo a recoger mis cosas. No son muchas, dos maletas con mi ropa, la radio y la televisión, lo único que me pertenece solo a mí. Me siento en el sofá con el ordenador y me pongo a buscar pisos en alquiler.
 
Mis últimos negocios con Martín me han dejado muy bien, aunque considere ese dinero sucio, no soy idiota y tengo que utilizarlo, aparte del que tengo de la venta del coche al Gordo, - que hizo que durante un tiempo, creyera haber perdido para siempre a _____ - mas de la mitad aún, pues lo que he gastado ha sido en flores para _____ y para el ataúd de su padre, pero ese dinero no pienso tocarlo, quiero gastarlo con ella y en ella.
 
Así que apunto unos cinco números de teléfonos que he encontrado en algunas páginas y que por las fotos parecen estar bien y que se ajustan a mis necesidades tanto en espacio y economía.

Llamo al primero y me dicen que ya esta alquilado, en el segundo piden dos entradas y no lo tengo, en el tercero no me lo cogen.

Suspiro, que bonita suerte estoy teniendo.

 Marco al cuarto después de terminarme una cerveza y me lo coge un chico que me dice de quedar para verlo esa misma noche, no tengo nada mejor que hacer así que le digo que si. Por si las dudas llamo al quinto y esta vez me coge un chica que no para de parlotear y casi pareciera que no lo quiere alquilar, pues pone pegas. En cualquier caso, ya tengo de momento una opción. Y espero que, con este cambio de piso, también haya un cambio en mi vida.


                          Cαριтυlσ Nυєvє.

______ ~

Cuando llego a casa me encuentro con mi madre sentada mirando a la nada. No me hace falta verla de frente para ver que esta enfadada y preocupada. Sé que he hecho mal, pero no ha sido intencional.
 
- Hola mama- le saludo cuando entro, me acerco a ella y hace algo que nunca antes siquiera se me hubiera pasado por la cabeza que haría. Me pega. Yo me llevo la mano a la mejilla donde me propino el golpe y la miro sorprendida sintiendo las lágrimas bajar por mis mejillas-

- Oh Dios- exclama y se echa a llorar- lo siento cariño, lo siento- y me rodea con sus brazos pero yo sigo en estado de shock- estaba tan preocupada, pensé que te había ocurrido algo, perdóname.

 
Cuando por fin salgo de mi trance me separo de ella bruscamente, la miro enfadada. Nunca antes, ni cuando era niña se atrevió a pegarme, y que lo haga justamente ahora, con todo lo que ha estado pasándonos me cabrea. Ella ha pasado de mí todos estos días pero resulta que un día no estoy y ¿me pega?
 
- Nunca más me vuelvas a poner un dedo encima- le digo con la voz envenenada y mirándola de un manera que nunca antes hubiera hecho-

- Perdón cariño, pero estaba asustada y… ni siquiera te molestaste en llamar.

- ¿Tal vez porque no tengo saldo?- Pongo como excusa-

- ______ …

Se interrumpe al ver como la luz del salón, la cocina y la televisión se apagan.

Yo frunzo el ceño y no le doy mucha importancia, a veces pasa cuando hay muchas cosas conectadas y ese tipo de cosas, pero miro la cara de preocupación de mi madre y cómo se echa a llorar.

Yo la miro preocupada y me quedo mirándola mientras ella se sienta en el sofá, apoyando los codos en las rodillas y escondiendo su cara entre sus manos.

 Me siento a su lado dudosa y se me salen algunas lagrimas solo con verla así, miro la mesita llena de papeles, recibos más bien.
 
- ¿Qué pasa, mama?

- Problemas, problemas y más problemas. Eso pasa- ella toma aire antes de mirarme y se limpia las lagrimas con rabia- me han quitado el dinero del paro de tu padre. Y sabes que desde hace un tiempo no recibo el mío.

- Y entonces… ¿eso que significa?

- Que no tenemos nada. Si antes ni a fin de mes llegábamos… ahora ni quiera para principios de mes tenemos algo.

- Mama…

- Nos acaban de cortar la luz, no hay nada de comer, solo queda algo de leche y pan- dice con la voz en un hilo- no hay gas y como no pague en menos de dos días el agua nos la quitan y la dueña de la casa… quiere que le paguen si no nos echa.

Yo me quedo en silencio escuchándola. ¿Cómo puedes ser? ¿Cómo es posible que de pasar la mejor noche de mi vida al día siguiente pase esto? De verdad creo que la vida es cruel. No es justo que todo esto nos pase a nosotras, me quitan a mi padre y ahora me quitaran el techo en el cual duermo. Esto a las malas personas no le pasa, claro que no, esos lo tienen todo. ¿Es que acaso tengo que ser una puta perra barata para dejar de sufrir?
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Holiwis ^^
¿Todo bien?
Pues no tengo nada interesante que contaros a si que... aquí os dejo otros dos capítulos de la nove, espero que os gusten, aunque no son gran cosa... :c
Mañana no se si podré subir, si subo será por la noche... noche, el motivo es que me voy a celebrar mi cumpleaños oh yeah! ^^
Y nada más, que os quiero mucho y que mil gracias por leer.

Maratón: Cαριтυlσ Tяєѕ al Cαριтυlσ Sιєтє.


                                     Cαριтυlσ Tяєѕ. Maratón 1/5

_______ ~
 

Lorena me mira nerviosa, muy nerviosa, yo solo la miro confusa, preguntándome porque me mira de esa manera.

 Parece asustada de decirme algo, en el último mes tampoco he hablado mucho con ella ni con el resto de las chicas, por lo que sé, ellas han decidido quedarse en Madrid para estar conmigo. Pero en cuanto estemos todas reunidas las haré desistir de esa idea.
 
- Lore, ¿Me vas a contar que pasa?

- Es que no se como te vas a tomar esto… yo se que tu no estas pasando por un buen momento y lo último que quiero es molestarte más- dice haciendo una mueca-

- Solo dilo- le digo ya algo irritada-

- Bueno… tu sabes que yo he estado más sola que la una- yo solo asiento entendiendo que se refiere al tema de chicos- y bueno… resulta que, me ha comenzado a gustar un chico- dice mordiéndose el labio, yo sonrío feliz por ella-

- Eso es bueno.

- La cosa es que… se trata de alguien que tu conoces muy bien- yo la miro más confusa que al principio-

- Ve al grano.

- En este ultimo mes nos hemos estado viendo mucho y ha surgido algo, yo al principio pensé que no, que el solo estaba conmigo para olvidarte a ti, ya sabes que él… pero resulta que ahora estamos saliendo, apenas llevamos dos días, quería que fueras la primera en enterarse y que me dijeras tu opinión- Lorena habla de forma rápida y atropellada pero la logro entender igual-

- ¿De quien hablas?- temiendo que se tratara de Justin, pues en este mes apenas y caso le he hecho-

- De Daniel- dice mordiéndose el labio, yo la miro incrédula.-

- ¿Dani? ¿Estas saliendo con él? - ella solo asiente- vaya, jamás en mi vida me hubiera imaginado eso- digo sorprendida aún-

- ¿Estas molesta?

- ¿Por qué tendría que estarlo? Yo no siento nada por Daniel aunque me sorprende mucho el hecho de que este contigo… ¿Tu estas segura?- ella asiente- ¿Y él?- pregunto algo más dudosa-

Hasta hacia un mes él me juraba amor a mí, y no es que me moleste que ahora salga con ella, de hecho, me alegra habérmelo quitado de encima, pero no puedo evitar pensar que pueda estar jugando con ella.

 Suena el timbre de su casa, pues yo había ido con la intención de pasar un poco de tiempo con mi amiga y que ella me ayude a distraerme. Y vaya que lo consiguió.

 Unos pocos minutos después entra Daniel, quien parece avergonzado y se acerca dudoso a mi.

- Hola- me dice tímido-

- Hola- me limito a decir con una mueca, se hace un silencio incomodo, pues aunque yo no tenga celos o algo por el estilo es extraño el saber que tu mejor amiga y tu ex salen.-

- Tranquilo, Dani, ya se lo he dicho- dice Lorena-

- ¿Y que te parece?- me pregunta tenso-

- Me resulta extraño. Quiero decir, ¿Cómo surgió?- ellos dos se miran y se sonríen con cierta complicidad-

- No lo se, simplemente surgió. Tu… estabas muy metida en tu mundo y yo… aquel día que te vi en el funeral de tu… papa y vi la forma en la que te apegabas a Justin y en que solo querías estar con él, me hizo darme cuenta que, realmente estaba perdiendo el tiempo intentando algo contigo. Además que solo la cagaba,- y los tres soltamos una pequeña risita- entonces aquel día hable con Lorena, la verdad me sentía como una mierda porque fue la primera vez que en verdad me di cuenta que entre tu y yo nunca pasaría nada.

<< Y se podría decir que ella me ayudo a superarte, por así decirlo- dice encogiéndose de hombros- con ella me lo paso realmente bien, me ha hecho olvidarte… al menos olvidarte de la manera, ya sabes, sentimental. - él se acerca a mi- yo te quiero mucho, lo que tuve contigo fue muy importante y de verdad te quería. Pero supongo que me cansé de esperarte, y he decidido darme un oportunidad de conocer a otras chicas, de conocer a Lorena que me parece increíble, por algo es tu mejor amiga- dice y ríe un poco, yo solo sonrío >>.

- Me parece bien, me alegra escuchar que ya no pienses en mi de ese modo porque te hacías daño, y me alegra que Lorena este contigo, eres un buen chico- digo dándole un golpe juguetón en el hombro-
 
Enseguida él parece relajarse y me sonríe más seguro. Puede que lo que haya dicho sea verdad, él solo andaba detrás de mi y yo… solo tenía ojos para Justin. Sigo teniendo ojos para él. Cada vez que pienso en él me dan ganas de llamarle y decirle que corra abrazarme, o correr yo a sus brazos. Me pregunto porque mierda no lo he hecho. Supongo que solo necesito mi tiempo antes de verle y rogarle que se quede junto a mí.
 
- Bueno, las chicas ya vienen de camino- dice Lorena colgando el teléfono, unos segundos después se escucha el telefonillo sonar-
 
Cuando las chicas suben y se encuentran allí a Daniel nos miran confusas a Lorena y a mí, yo río por dentro, se caerán de culo cuando se enteren.

Daniel se despide de mi y algo dudoso o más bien tímido y vergonzoso le da un corto pico a Lorena antes de irse y dejar a las chicas boquiabiertas.
 
- ¡Oh dios mío!- grita Mónica-

- Lorena se ha echado novio- grita riendo Marta, yo río con ellas-

- Y el ex de ___*… Cuéntanos todo, absolutamente todo- dice Mónica con cara de chismosa y pervertida al mismo tiempo- ¿Por qué a ti no te importa, no?- dice mirándome con una mueca, yo niego con la cabeza y sonrío a medias-

Nos quedamos el resto de la tarde hablando sobre eso y otros temas, decidimos que esa sería nuestra tarde de chicas, ellas hacían mucho el tonto la mayor parte del tiempo con el objetivo de hacerme reír, y en verdad lo conseguían.

Les digo que se tienen que ir de vacaciones a la playa y al pueblo, como cada año y aunque me cuesta en un principio convencerlas caen por mis amenazas, no creo justo que ellas se queden aquí aburridas por mí. No, ya suficiente están haciendo, realmente necesitaba este tiempo con ellas. Estoy segura de que poco a poco mi vida volverá a la normalidad, todo es el tiempo.



                     Cαριтυlσ Cυαтяσ. Maratón 2/5

Justin ~

Siento su mirada amenazante, pero me mantengo firme. No pienso caer en su juego, no pienso seguir en esto. Estoy verdaderamente decidido y él no me hará cambiar de opinión por más amenazas que me haga o cosas que me ofrezca.
 
- No puedes hacerme esto a mi, Justin- me dice Martín intentando mantener la calma.-

- Tú mismo me dijiste una vez que el día que decida marcharme lo aceptarías, entenderías que es mi hora de hacer otras cosas, seguir otro camino.

- Pero no ahora. Justin, tengo muchos planes y tú estas incluido, eres bueno, siempre te lo he dicho. Te quiero aquí. - me dice en tono exigente, yo niego con la cabeza-

- No lo entiendes… esto ya no es lugar para mí. - digo señalándome- sabes que si entré en esto fue por necesidad y por compromiso contigo… creo que te he cumplido, tengo casi tres años metido en esto. Ya es suficiente para mí.

- Entonces dime, ¿Qué pretendes hacer?

- Voy a conseguirme otro trabajo- digo seguro de mi mismo- es verano y por estas fechas siempre se puede encontrar algo, aunque sea a tiempo parcial, lo que sea- digo encogiéndome de hombros- pero esto no.

- ¿Qué tiene de malo esto? Te he dado todo lo que tienes… ¡Todo lo que tengo yo!- exclama más fuerte señalando a su alrededor- mira esta casa, mira mi ropa… mírate. A pesar de tener ese típico estilo que tanto se lleva ahora, con los pantalones a medio culo, pendientes en el oído y todo eso… Justin, vives bien, estas bien. Y tu ropa es de buena marca aunque no lo parezca.

- Si, pero…

- Dime algo- dice interrumpiéndome- ¿Te ha faltado dinero alguna vez?

- No, no me ha faltado dinero, pero quiero que el dinero que tenga ahora sea… limpio.

- ¿Limpio? ¡Mi dinero no es sucio!- dice algo alterado- el dinero que tienes, tampoco lo es. Arriesgas tu vida ¿No? Como los bomberos - dice burlón-

- No digas tonterías- digo bufando- si corro riesgos en por andar precisamente en cosas que no debo.

- Oh vamos Justin antes no te importaba, ¿Qué pasó con el “no tengo miedo a nada” “ me encanta el riesgo”? ¿Te has vuelto un gallina, Justin?- yo tenso la mandíbula intentando no caer en su juego, pero me esta provocando-

- No soy un gallina por pensar como un hombre. Por querer ser un hombre de verdad- le digo con la mirada envenenada, él me mira enfadado pero suspira controlándose-

- ¿Insinúas que este trabajo es de poco hombres?

- Solo digo que un hombre de verdad tiene un trabajo… honrado- él suelta una carcajada que hace que me entren ganas de golpearlo. Por primera vez siento ganas de eso.-

- ¿Quién te ha metido esos pajaritos en la cabeza? - yo me quedo callado- pareces otro, Justin. No eres ese chico al que recogí, al que tanto ayudé y que tenía ganas de aprender, de hacerme ver cuanto agradecido es.

- Sigo estando agradecido- digo entre dientes, sabe cuanto me afecta ese tema- siempre lo estaré. Pero no por ello tengo que estar toda mi vida tras tu culo- él parece sorprendido por esa forma de hablarle y sonríe a medias-

- Oh, la serpiente esta sacando su veneno- dice y ríe- me decepcionadas.

- Lo siento, pero lo dejo y no hay nada que puedas hacer para convencerme. - me levanto de la silla dispuesto a irme-

- Justin, no me hagas enfadar- dice en un tono más serio- no me hagas sacar mi ira contra ti. Eres el hijo de mi hermana, en cierta forma te aprecio. Pero te juro que si sales por esa puerta te convertirás en mi enemigo. Porque todo el que me abandona es un traidor. Un traidor es un enemigo. Y ¿Tú sabes lo que le pasa a los traidores?

- ¡Yo no te estoy traicionando!- exclamo alterado- solo quiero seguir con mi maldita vida lejos de esto ¿Por qué demonios no lo entiendes?- le sigo gritando-

- Baja tu tono conmigo- me dice amenazante-

- Si me aprecias por ser el hijo de tu hermana… Pues déjame en paz, ¡Déjame ir, maldita sea!

- No- grita- de aquí nadie se va si no es porque yo lo digo.

- ¿Así que se trata de eso, no? - digo bufando- !Es tu puto capricho! Claro, no es que yo sea bueno, no es que tengas grandes planes conmigo…. Es que no te haces a la idea de que alguien te deje de lado, de que alguien se marche.

- Eres tan estúpido- dice mirándome con desprecio- pareces nuevo, como si no lo supieras - hace una pequeña pausa- esto funciona así, Justin. Sabes que estos negocios van así, no puedes simplemente despertar un día y decir ‘ah, pues lo dejo’.

- Tú me dijiste una vez que cuando yo quisiese irme…

- ¡Eso fue antes! Métetelo en la cabeza, eso es el pasado. Y ya te he dicho que tengo planes, ¡Un niñato estúpido no me los va a estropear!

- ¿Qué demonios te pasa?- le pregunto mirándole incrédulo- ¿Qué coño me he perdido en estos últimos meses que te has vuelto tan capullo? Mas de lo que ya eras.

Y entonces siento un fuerte dolor en mi mandíbula. Ni siquiera me llevo la mano al lugar, solo me quedo allí parado asimilando que Martín me acaba de dar una bofetada.

 Siento algo de sangre en el labio, solo la saboreo mirándole intacto. Ni si quiera me duele porque estoy demasiado cabreado. E incrédulo. Y es como si lo viese todo con claridad ahora.
 
- Nunca has hecho nada por mi en realidad. - afirmo como  si acabase de despertar llegando a la realidad- no se como he sido tan idiota de pensar que tu me ayudabas.

- Lo he hecho.


- No. Solo me utilizabas, cuando llegue a ti, me aceptaste porque yo no era más que otro adolescente idiota que caí en tus juegos, te aprovechaste de mí porque yo estaba solo en esta maldita cuidad, no conocía a nadie, no tenía a nadie porque los que tenía… me dieron de lado.

- Estas equivocado.

- No, no lo estoy y lo sabes. Me llenaste la cabeza con cosas, mujeres, fiestas, dinero… me compraste- digo casi riendo histérico- y si antes podía llegar a tener alguna duda por compromiso a ti. Te aseguro que ya no.

- Justin…

- ¡Justin nada! Tú vales mierda igual que el resto. No tienes derecho a exigirme nada, todo lo que me has dado me lo he ganado. - le digo lleno de rabia-

- Te vas a arrepentir de tus palabras.

- Te aseguro que no.

Me doy media vuelta y salgo de allí.

 Cuando voy saliendo me encuentro con algunos de los que trabajan con Martín y me miran con cautela, todos saben mis planes de irme, de dejar estos negocios, aunque a la mayoría le importa más bien poco, no dudarían en pegarme un tiro si esas fueran las órdenes de Martín.
Porque
ellos son más de los pobres idiotas que han caído en sus juegos, en sus palabras, en llenarte los bolsillos de dinero y ponerte un coño entre las piernas.

 Sonrío, yo ya no soy uno de ellos.


                        Cαριтυlσ Cιиcσ. Maratón 3/5

________ ~


Las chicas me miran dudosas y yo les intento dar mi mejor sonrisa para convencerlas de que estaré bien y que no deben preocuparse por mi.

 Hoy sale su tren rumbo al pueblo de Marta en Barcelona y aunque por un lado me hubiese encantado ir como en otro años, no creo que sea el mejor momento para eso, mi ánimo no esta de lo mejor y más que disfrutar les amargaría las vacaciones y tendrían que estar pendientes de mi todo el tiempo para que no me entrara el bajón. En pocas palabras: sería una carga.
 
- Si quieres me quedo yo contigo- me dice Lorena en voz baja, yo le sonrío y niego con la cabeza-

- Estaré bien, hablaremos todos los días, disfruta ese mes, te lo mereces- digo y le guiño un ojo, ella me da un leve abrazo y enseguida las chicas se les unen-

- Oye, pero si Nikki te molesta ya sabes… nos llamas y venimos a ponerla en su lugar- yo me río por el comentario de Marta-

- Tranquila, sabré defenderme sola de esa… chica. - a pesar de que ella se haya portado bien conmigo al morir mi padre, no quiere decir que nos vayamos a llevar bien, aunque si ella no me busca por mi no habrás problemas. -

- Esta bien, lo sabemos- dice Mónica- no me puedo creer que no vengas con nosotras- dice con carita triste- pero entendemos y… cualquier cosa aquí estamos.

- Si mama- le digo en broma, me abrazan por última vez-

Se dan media vuelta para irse, no sin antes ver el largo beso que se da Lorena con Daniel, yo aparto la mirada y no porque me moleste, sino porque es incomodo mirar una pareja besándose, cuando se separan se despiden de nosotros dos con la mano.
 
- ¡Estudia para Selectividad, eh!- me grita Marta, yo ruedo los ojos y asiento con la cabeza, aunque no tenga ningunos planes de hacerlo.-

- Vaya… nos abandonan, eh- me dice Daniel intentando romper el incomodo silencio cuando ellas ya están lejos-

- Si- digo sonriendo- yo me voy.

- ¿Quieres ir a un bar y tomar algo?- me mira con cara de ilusionado-

- No creo que…

- Oye, no me malinterpretes, quiero decir, Lorena ni siquiera se ha subido al tren todavía, como para querer engañarla… y con una de sus mejores amigas. No soy tan estúpido.

- Lo se, pero entiéndeme, es raro. Quiero decir, esto pasó de un momento a otro- digo encogiéndome de hombros-

- En realidad no pasó de un momento a otro, Lorena te contó seguro con lujo de detalle: puede que parezca que haya sido rápido, pero durante el último mes, la he visto casi cada día, y he pasado momentos con ella que… me han ayudado mucho.

- Lo se, supongo que yo lo veré así porque apenas y he salido de casa- digo haciendo una mueca-

- Mira, aunque tu y yo definitivamente nunca tendremos nada, yo estoy aquí ¿Vale? Siempre te apoyaré- me guiña un ojo y me da un corto abrazo-

- Lo se, gracias.

- Ahora, ¿Te vienes a tomar algo?

- No… tengo planes, quizás en otro momento- él parece entenderlo y asiente con la cabeza, me despido de él y me marcho de allí.-

Estoy nerviosa. Mucho debo decir.

 Me dirijo a casa de Justin y estoy ansiosa por llegar y verle, pero también asustada porque él me rechace o este haciendo este viaje en vano porque no este en su casa. Porque él no tiene ni idea de que voy hacia allí.

 Él ha estado pendiente de mi pero respetando mi espacio.

 Pero ya no más, ya no seguiré encerrada negándome a estar con nadie, no quiero eso. Puede que resulte doloroso, pero la gente tenía razón. Debo ser fuerte.

Después de una media hora de viaje en el metro llego a su portal, dudo un momento en si tocar el telefonillo, pero no hay marcha atrás, ya que he venido hasta aquí debo ser valiente.

 Toco y espero unos segundos, que se me hacen eternos, cuando siento que debería haber recibido cualquier respuesta vuelvo a tocar, unos segundo después, escucho su voz y el corazón se me acelera.
 
- ¿Si? ¿Quién es?- me pregunta-

- Yo- digo nerviosa-

- ¿______? - yo asiento como estúpida, como si el me pudiese ver y le susurro un si, enseguida me abre la puerta.-

Al entrar subo por el ascensor hasta su piso y cuando llego lo encuentro apoyado en el marco de la puerta.

Me sonríe y logra derretirme por dentro.

- Hola Justin- digo tímida acercándome a él-

- Hola _____- dice sonriendo y mirándome medio embobado, que casi me produce risa- ¿Cómo estas?- él me invita a pasar y duda en si abrazarme al darme dos besos, pero yo le abrazo, no soporto estar cerca de él y no tocarle.-

- Mucho mejor- susurro-

Me siento en el sofá y miro a mi alrededor, ahora está muy diferente a como lo dejé la última vez que estuve.La trágica tarde en que tuvo una sobredosis.

 Él se va a la cocina pero vuelve unos segundos después con una cerveza para él y un vaso de zumo para mi.
 
- ¿Es que no hay más cervezas?- me sorprendo al escucharme preguntar eso y él también lo parece-

- Si, aamm, si quieres…

- No importa, déjalo- digo intentando sonreír pero me sale una mueca-

Él solo asiente y mira su lata de cerveza sin saber que decirme, noto que esta sentado un tanto alejado de mí así que con todo el disimulo que puedo me acerco a él.

 Ni siquiera se que decirle, no me prepare ningún discurso o algo.
 
- Nunca te dije que me gustaron tus flores- suelto de repente- ya sabes, cuando me llenaste la casa de ellas, son mis favoritas, es lindo saber que lo recordabas, los chicos no suelen recordar esas cosas.

- Si, bueno… con todo lo que ha pasado- él hace una pequeña mueca y se encoge de hombros, yo me quedo un poco decepcionada ¿Qué le pasa? ¿Es que no le apetecía verme? - pero me alegra que te hayan gustado.

- Si, gracias- susurro- y por lo del ataud… de mi padre. Eso fue un gran detalle por tu parte, no te lo había dicho, pero mi madre y yo te lo agradecemos mucho, si no hubiera sido por ti no se de donde hubiera sacado la mitad que faltaba- digo haciendo una mueca- algún día te lo pagaré.

- Eso no fue nada, quería hacerlo. No te preocupes por eso, no me debes nada.

Creo que ha sido un grave error venir.

 Justin esta más seco que nunca, esto me recuerda al principio, a cuando estábamos en clase y él parecía hablarme por obligación, bueno, lo hacía por obligación en algunas clases.

Soy una estúpida.

 De repente siento su mano en mi mejilla y cuando le miro a los ojos él parece estar pasándolo mal. Y me doy cuenta de que a mí se me salieron las lagrimas.
 
- Odio que llores, no lo soporto- dice con algo de rabia-

- Estoy bien- digo aunque me sienta todo lo contrario, sentir su rechazo, pensar en el comportamiento de mi madre y encima en mi padre… algún día iba a explotar. -

- Yo no estaría tan seguro.

- Tengo que ser fuerte- digo reprimiendo las lagrimas-

- No- me dice entrelazando una de nuestras manos- No tienes que ser fuerte- me acaricia las mejillas, se acerca más a mi y me besa encima de las lagrimas- llora todo lo que quieras, desahógate si necesitas seguir haciéndolo, derrúmbate si es lo que necesitas, porque yo estaré aquí, ayudándote a levantarte después- Justin une su frente a la mía- yo seré fuerte por ti.

No puedo evitar emocionarme al escucharle decir eso, el me estrecha entre sus brazos y yo suelto otra lagrima, es gratificante saber que tienes una persona al lado. Es genial saber que le tengo a él.

 Me separo un poco para mirarlo a los ojos, apenas unos centímetros nos separan y ahora que le tengo tan cerca me doy cuenta de cuanto necesito a alguien. A él.
 
Me acerco más hasta unir nuestros labios, de forma suave y lenta comienzo el beso, él no se lo esperaba pero termina por aceptarme y me abraza por la cintura.

Su lengua danza con la mía de forma perfecta.

 Le rodeo por el cuello para intensificar el beso y le escucho soltar un suave gemido en mi boca, mi corazón se acelera solo de saber que yo provoco eso en él.

 Susurra mi nombre y yo solo tengo ganas de besarlo el resto de mi vida.

 Esos labios son lo único que me hacen sentir viva, su forma de abrazarme, de acariciarme, me recuerdan que yo estoy locamente enamorada de él a pesar de haberlo querido negar o intentar olvidarlo. Ahora mismo lo único que necesito es a él.

- Justin, no quiero derrumbarme, no quiero llorar- le digo cuando nos separamos- quiero estar bien y tu eres lo que me hace bien- él sonríe- quiero que me ayudes, eres el único que me puede hacer feliz.
 
Justin no responde, solo me besa, ahora más ansioso y posesivo, pero lo disfruto.

 Me olvido del mundo, solo quiero estar con él.

 Lentamente siento el sofá bajo mi cuerpo, sus besos bajando por mi cuello de manera suave y dulce, y de nuevo atrapando mi labio inferior para succionarlo, solo cierro los ojos y disfruto del momento, de lo que él me da. De su manera de decirme que me quiere hacer feliz.
 
- Tú eres lo único bueno que tengo- me susurra al oído- no te haces idea de todo lo que siento por ti. De todo lo que soy capaz de hacer por ti.
 
Yo me quedo embobada mirándole, él vuelve a besarme. Y hacemos el amor. De manera que solo nosotros sabemos, no apartamos la mirada en ningún momento, cuando lo siento dentro de mi es como sentir el cielo, pero de mirarle a los ojos y de cómo estos me dicen que me quieren.
 
 

                  Cαριтυlσ Sєιs. Maratón 4/5

Justin ~


Despertar a su lado es posiblemente lo mejor que exista en el mundo. Sentir como sus delgados y pequeños brazos me rodean por la cintura mientras su cabeza se esconde en mi cuello.

 Joder, se me acelera el corazón cada segundo más y pienso si es posible.
 Me muevo con cuidado de no despertarla, ella gruñe al sentir mis brazos apartar los suyos y vuelve a rodearme, río por lo bajo, vuelvo a separarla de mí pero ella se acurruca de nuevo a mi alrededor, esta vez abrazándome más fuerte.

 Amo a esta chica, maldita sea la amo y no la voy a cagar nunca más, pienso cuidarla con mi vida.
 
- ¿No me vas a dejar ?- susurro-

- No, nunca te dejaré- dice adormilada pero con una sonrisa de niña traviesa, yo río bajo y en un movimiento la subo encima de mí. - Estoy cansada.

- ¿Y? - digo mientras le acaricio el culo, ella gime suavemente-

- Nada, que puedes hacer lo que quieras conmigo pero no me despiertes- murmura dormida, yo me río-

- Esta bien, si tu me dejas…

Dejo de hablar y comienzo a besarle el cuello como puedo, porque la tengo encima y ella no coopera en nada más que en soltar suaves suspiros que me hacen estremecer.

Me doy la vuelta colocándola a ella debajo y sigo acariciándola, beso sus labios y me exaspero al ver que ella no me sigue, pero me encanta tocarla, me quedo algo embobado mirándola completamente desnuda en mi cama, se me acelera el corazón, nadie jamás me ha hecho sentir lo que ella.
 
Beso su cuello y voy dibujando un camino de besos por su cuerpo, me detengo en sus muslos y me quedo allí más tiempo, ella se remueve y gime bajo, sonrío y sigo provocándola.

Sigo bajando y vuelvo a subir, le doy un chupetón en el pecho y ella se queja en sueños.
 
Vuelvo a bajar mientras le acaricio las piernas y entonces siento sus manos acariciándome el pelo, cuando levanto la mirada veo que mantiene los ojos cerrados pero que en realidad esta despierta.

- Sigue- me pide con la respiración dificultosa- hazme olvidar hasta mi nombre.
 
Muerdo sus muslos y la escucho gemir, disfruto con escucharla, con sentirla así, se está en la gloria.

 Ella me lleva la cabeza hasta su centro, no hace falta más, sé lo que quiere y yo se lo daré.

 Paseo mi lengua varias veces por su clítoris y sus gemidos son cada vez más fuertes, llevo una de mis manos hacia arriba, y acaricio sus senos mientras sigo besando su feminidad.

 Meto dos dedos dentro de ella y hago pequeños movimientos circulares, ella me pide más y no dudo en dárselo. Mientras la penetro con los dedos saboreo su sexo.
 
Sus gemidos son cada vez más fuerte y gime mi nombre varias veces, excitándome y haciéndome ir cada vez más rápido, me rodea con sus piernas y parece querer meterme la cabeza dentro suya, y es lo que quiero yo también, hacerla disfrutar, hacerla gritar más todavía, y sigo, volviéndola loca, loco yo con escucharla. Y se corre en mi boca. Disfruto de sus fluidos, dulce como ella.

- Oh, Justin

- Esto no ha terminado- susurro en su boca y la beso-

 
Ella me rodea por la cintura y acaricio su centro con mi pene, se muerde el labio y meto la punta de mi pene en ella, succiona mi cuello, sé que me dejará una marca allí pero me gusta solo por el hecho de que viene de ella.

 Termino por penetrarla y gruño contra su boca mientras ella grita.
 
No hay nada mejor que esto. Que tenerla a ella.


                  Cαριтυlσ Sιєтє. Maratón 5/5


______ ~
 
La luz del sol que entra por la ventana comienza a despertarme, odio eso, pero al sentir los brazos de Justin rodearme por la cintura recuerdo que ayer fue nuestra reconciliación y que no hemos vuelto a salir de la habitación más que a por algo de comer. Y volviendo a mi sentido común eso significa que he pasado la noche fuera de casa.
 
Cojo el móvil a la velocidad de la luz y me doy cuenta que he recibido diez llamadas perdidas de mi madre.

 Me asusto y maldigo, tiene que estar muy preocupada por mí y lo último que quiero es darle más dolores de cabeza del que ya tiene. Aunque por otro lado, me alegra saber que recuerda que existo.
 
- ¿Qué pasa?- pregunta adormilado Justin detrás de mi-

- Mi madre me ha llamado varias veces, debe estar preocupada, no le avisé de que me quedaría aquí, ni siquiera sabe donde estoy- digo mordiéndome el labio, Justin se incorpora a mi lado y me besa la mejilla-

- Pues llámala, dile que estas conmigo- dice tranquilamente-

- ¿Flipas, no? ¿Cómo le voy a decir que pase la noche contigo? Mi madre es liberal pero ahora sabes que no estamos pasando por buen momento, además que esta muy extraña últimamente- digo haciendo una mueca- y en realidad no se que piensa de ti ahora, te esta muy agradecida pero…

- Esta bien- bufa- lo entiendo. Todavía no me he terminado de ganar a mi suegra- dice bromeando, yo le sonrío y me subo encima de sus piernas rodeándole por la cintura- Mm no me provoques- me susurra con la voz ronca-

Yo río traviesa y le doy un pequeño piquito sensual, él ronronea provocándome una risa, Justin me toma por el cuello para besarme más profundo, me acaricia la cintura y presiona su pene contra mí provocándome leves gemidos. Me separo de él antes de que llegue a más.
 
- No, quiero más- murmura sobre mi cuello-

- Me tengo que ir.


- Quédate un rato más.

- En serio mi amor, me tengo que ir- le digo levantándome. Noto su mirada en mi nuca y me doy media para verle- ¿Qué?

- Me has llamado amor- dice acercándose a mí con una sonrisa pícara- suena bien- Susurra sobre mis labios- muy bien… mi amor- dice por último antes de chocar sus labios contra los míos y me rodea por la cintura y sus caricias me hacen cosquillas-

- Ya, déjame ir- le digo riendo-

- No quiero- dice como un niño pequeño y me rodea por la cintura-

- De verdad Justin- le digo ahora más seria- mi madre se enfadará.

- Esta bien- me suelta y se vuelve a la cama con los brazos cruzados, yo me visto rápidamente y me acerco a él para darle un beso antes de irme-

- ¿Estas enfadado?

- No

- ¿Seguro?

- Sí

- Entonces dame un beso.

- No te lo mereces- dice aún con los brazos cruzados y sin mirarme, yo reprimo una risa-

- Estas conversaciones suelen ser al revés ¿Sabes?

- Me da igual- dice en la misma posición-

- Esta bien, me voy- él solo se encoge de hombros, río por lo bajo y le beso, él no duda en responder pero después sigue igual-

Salgo de su casa con una sonrisa en los labios a pesar de su drama, ahora mismo me siento tan bien. Tan llena y feliz. Justin logró que me olvidará del mundo, de mis problemas, de todo lo malo. Solo ha sido nosotros. Él y yo. Justin y yo. Y así espero que siga… toda mi vida.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Hoooli ^^
Lo siento mucho por no subir antes.... no es que estuviera haciendo algo interesante si no, que el 23 no me apeteció subir y ayer fue mi cumple y estuve ocupada...
Pero aquí tenéis maratón de cumpleaños :3
Espero que os gusten e.e
Os quuuiero.