Cαριтυlσ Ochєитα&Cυαтяσ. Segunda parte y Cαριтυlσ Ochєитα&Cιиcσ.

                        Cαριтυlσ Ochєитα&Cυαтяσ. Segunda parte.

Justin ~



  Termino de desayunar y me doy una ducha, hoy he amanecido de buen humor, sé que _____ recibió mis flores esta mañana, llame a la floristería para que me lo confirmasen. No me quiero ni imaginar su cara al verlo. Espero que le haya gustado y que esas que le mande a su madre las haya recibido de buena gana. Tengo que ganarme a la suegra.
 
Marco su numero esperando que me lo coja, suena varias veces pero me manda al buzón de voz. Espero cinco minutos y vuelvo a llamar. Nada. A los diez minutos vuelvo y marco, suena y suena y no me lo coge. Comienzo a ponerme ansioso. Decido llamarla más tarde, antes de pasar por casa de Martín a por más marihuana. Antes de llegar vuelvo a llamarla. Y por fin me lo coge.
 
- ¿Si?- pregunta, su voz suena triste-

- Hola hermosa, ¿recibiste mis flores?

- Si- susurra, ¿Qué le pasa?-

- ¿Y que te parecieron? ¿te gustaron? - nadie responde pero siento su respiración - ___* ¿estas?

- Si- vuelve a susurrar con la voz entrecortada- Justin… - ella se interrumpe y rompe a llorar, yo me alarmo-

- ¿Pasa algo? - le pregunto preocupado pero solo escucho su llanto que me rompe en mi pedazos- ¿Qué ha pasado hermosa? ¿Por qué lloras? ¿Te ha pasado algo? ¿Te han hecho algo?- pregunto como un loco-

- Mi papa ha muerto.
Me hubiese esperado cualquier cosa menos eso. No lo pienso dos veces y le digo que voy a su casa antes de colgar y dar media vuelta rumbo allí. Martín se cabreará, pero es lo que menos me importa ahora mismo.
 
Llego rápido a su casa, en menos de media hora, aparco la moto como puedo y toco el timbre, ella tarda unos segundos en abrir que se me hacen horas, cuando me abre subo corriendo y encuentro la puerta de su casa ya abierta.

Me detengo a mirarla, esta sentada en el sofá con la cabeza entre las piernas, llorando.
 
Me acerco corriendo a ella y la abrazo, ella no dice nada solo solloza más fuerte en mi pecho.

La tomo por la cintura y hago que se ponga en mi regazo, mientras la mezo le acaricio el pelo, ella llora cada vez más fuerte y se me rompe todo por dentro, tengo ganas de llorar al igual que ella, de quitarle ese dolor y me da rabia no poder hacerlo.

 Se me escapa una lagrima, no soporto verla así, duele demasiado.
 
Nos quedamos así el resto de la tarde, las horas pasaban y ella seguía llorando en mi pecho, yo permanezco en silencio, ella no querrá que le hablen, no querrá escuchar un “tranquila, esto pasara” lo se, así que no tengo intención de hacerlo.
 
- Me duele, Justin… me duele el corazón, él se fue, Justin- dice entre sollozos-

- Lo se, amor. Así que no te preocupes, desahógate- le digo con los ojos cerrados mientras, siento su mirada en mi y abro los ojos para mirarla-

- Gracias por estar aquí.

- Siempre voy a estar- le susurro-
Ella vuelve a rodearme con sus brazos, la siento comenzar a sollozar de nuevo, como me gustaría quitarle el dolor, ser yo quien lo tenga y no ella.

Siento pasos detrás de mi y unos llantos también, vuelvo la cabeza y veo que se trata de los abuelos y de la madre de _____. Esta no parece darse cuenta pues sigue abrazada a mi como si fuese un salvavidas, rodeándome por la cintura y con su cabeza en mi pecho mientras llora.

                    Cαριтυlσ Ochєитα&Cιиcσ.

_______ ~



Tener a Justin aquí es más reconfortante de lo que imaginé. Hace tan solo dos días que mi padre murió. He recibido el pésame de mucha gente, de toda la familia, pero ninguno realmente sabe lo que se siente, así que me fastidian con esos “todo pasará” “sé fuerte” y sobretodo “no sabes cuanto lo siento” me parece tan hipócrita, pues ellos en cuanto terminan de hablar conmigo siguen con sus vidas como si nada hubiese ocurrido.
 
Mi madre y mis abuelos apenas han tenido tiempo de pararse a llorar, pues han tenido que organizar el funeral, llamar a toda la familia y conseguir dinero para el ataúd, que es bastante costoso, así que cuando Justin se ofreció a poner la mitad del dinero, mi madre con vergüenza tuvo que aceptar, cuando le pregunté a Justin que como tenía tanto dinero, solo me respondió que vendió el coche que nos separó.
 
Así que ahora aquí estamos, en el cementerio, ha venido casi toda la familia, mis tíos, mis primos, mis abuelos por parte de mi madre y mis amigas.

 Yo no suelto ni una lagrima, realmente creo que ya no me quedan, no he hecho más que llorar, a pesar del consuelo que me han ofrecido todos. Yo solo lo necesito a él. Y maldita sea nunca más estará conmigo. Nadie tiene idea de cuanto duele perder un padre. El mejor padre del mundo que es lo que él era. Lo que él es.
 
Miro a mi alrededor y veo a mis abuelos devastados, mis primos y tíos más cercanos parecen bastantes afectados también, pero si tanto le quisiesen hubiesen venido a verle en todos esos días que estuvo hospitalizado o haberle ayudado con los problemas que tenía. Pero no. Esperan a que este muerto para venir diciendo que están “para lo que necesites”.
 
Nadie presta verdadera atención a lo que dice el cura, en realidad todos miramos el ataúd donde se encuentra mi padre, ese que están a punto de enterrar, de meter bajo tierra.

 Las lagrimas vuelven a mi y siento los brazos de mi madre abrazarme. Ella esta tan destruida como yo pero intenta mantener la calma.

Escucho como el padre termina de hablar y como algunos familiares se acercan a dejar una rosa para él, mi madre se acerca también dejándome en los brazos de Justin, que ha permanecido en todo momento allí a mi lado.

 Yo le miro, él parece afectado y bastante triste, pero sé que es porque le duele verme así.
 
Me acerco al ataúd y miro la pulsera que en mis quince él me regalo, sonrío al recordar la ilusión que me hizo que me la diera. Me la quito y la tiro en el ataúd, ahora quiero que la tengas tú, te amo. Pienso. Y aunque quizás lo vean tonto yo sé que él me esta escuchando.

Me alejo un poco y es cuando se acercan a bajar el ataúd. Me lleno de miedo y me acerco corriendo.

- ¡No, papa! Papa, por favor- grito sin parar de llorar e intento lanzarme a la tumba pero unos brazos me lo impiden- no te vayas, papa- susurro por ultimo mientras siento como los brazos de Justin me rodean por la cintura y me alejan de allí.-

- Llévatela- escucho que susurra mi madre-

Yo no forcejeo, solo me dejo llevar por Justin mientras sigo llorando. ¿Por qué? ¿Es que no hay más gente a quien hacerle daño, eh? ¿Por qué tenía que morir? ¿Por qué él?.

Justin me sienta en un banco, no estamos lejos de donde se celebra el funeral, pues de aquí veo como bajan el ataúd y sigo llorando.

Justin se sienta a mi lado, no me toca, no intenta darme frases de ánimo ni me mira con lastima. Y se lo agradezco. Solo permanece allí, conmigo.
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Hoola!
Triste, triste, triste, triste y más triste han sido estos capítulos.
Si, el padre murió, ¿No teniais tanta intriga? Pues ahí esta, que trágico todo :c
Pero había gente que quería que muriese para que Justin consolara a rayita... y tal y tal y pues ya la esta consolando ^^
En verdad no se que más decir, solo avisaros de que quedan 4 capítulos y la primera temporada se acaba... Aún no se si hacer parón o no... depende del día que caiga por si tengo exámenes y tal :3
Y bueno, espero que os guuten y que no lloréis mucho leyendo e.e
5 comentariooos, os quuiero.