Cαριтυlσ Cυαяєnтα&Tres y Cαριтυlσ Cυαяєnтα&Cuatro.

                          Cαριтυlσ Cυαяєnтα&Tres
______ ~
 
 
 Siento mi corazón acelerarse más de la cuenta. No, no, no. Por Dios no más mierda, lo último que necesitamos Justin y yo ahora, es que un policía venga a fastidiar.

Miro a Justin y no logro entender como se mantiene tan sereno, casi parece que le da igual aunque sé que por dentro se muere de nervios, ¿Cómo no estarlo?

 Me aferro más a él sin poder ocultar que estoy cagada de miedo, ¿se lo querrá llevar? No, o sea… maldita sea nunca pensé que los malditos negocios de Martín terminarían afectándole y… joder.

Simplemente no.

Mi estómago esta completamente revuelto y no es el hambre, estoy jodidamente nerviosa y los segundos pasan y Justin no abre la boca, solo mira al tipo de arriba a bajo repetidas veces y se queda delante de mí como no queriendo que ese señor me vea.
 
- Nena, ve a contestar el móvil- me dice Justin sin mirarme.-
 
Yo le miro confusa y entonces saliendo de mis pensamientos me doy cuenta que su móvil no para de sonar, asiento con la cabeza azorada y me voy corriendo a la habitación, escucho la puerta cerrarse y por un segundo tengo la ilusión de que ese policía se haya ido, pero entonces escucho a Justin decirle que se siente y que le diga para que quiere hablar con él.

Cogiendo el móvil que vuelve a sonar, decido intentar no prestar atención allí a fuera.
 
- ¡Justin! Hasta que me coges el puto teléfono, maricón- escucho la voz de Roberto- me tenías preocupado, me acabo de enterar de lo que paso con Martín, tío joder no lo vi venir, te juro que si hubiese sabido que el muy gilipollas tramaba darte un susto te hubiese avisado, lo siento. ¿Estas bien?

- No soy Justin- le digo cuando termina con voz cortante, lo escucho gruñir por lo bajo con fastidio.

- ¿Y esperas a que termine de decir todo eso para hablar? Serás…

- Cállate idiota.

- Uy, yo también te quiero maldita mocosa prepotente.

- Púdrete.

- No me jodas eh, que mira que un día que no este Justin te crujo- dice y yo suelto una carcajada por su tono, casi que lo veo frunciendo el ceño por mi burla-

- No me hagas reír payaso, tú no serías capaz de eso a menos que quieras que Justin te cruja a ti. - lo escucho resoplar por la otra línea y sonrío divertida, debo reconocer que eché un poquito de menos pelear con él en estos días. Solo un poco.-

- ¿Cómo esta Justin?- pregunta cambiando de tema-

- Esta mejor, adolorido, pero yo sé cuidar de él. Aunque…- dudo si en decirle de nuestra visita-

- Suéltalo, ¿Qué pasó?

- Ha venido un policía, esta ahora con Justin en el salón.

- ¿Qué?- grita- mierda.

- ¿Qué crees que sea?

- No lo se, pero si la policía ha ido hasta allí es que saben de la existencia de Justin en el mundillo… intenta pegarte a la puerta y escuchar- me pide y lo hago- joder, tenía pensado ir ahora a verle, pero estando ese tipo allí, me puedo meter en líos- dice hablando más para si mismo así que me quedo en silencio- mira, tengo que colgar, en cuanto él se vaya, llámame ¿esta bien?

- Vale.

- Mantén la calma ¿ok?

- Si señor- digo rodando los ojos intentando parecer relajada, y ambos colgamos.-
Me acerco a la puerta y apenas logro escuchar la conversación, en especial la parte del policía pues tiene un tono alto en la voz.

Me siento nerviosa, si mal no entiendo no esta aquí para detenerle, pero sabe perfectamente bien que Justin ha estado mezclado en cosas ilegales. ¿Qué demonios haremos?

Justin ~
 
 
- ¿Y de que quiere hablar conmigo?- le pregunto después de ofrecerle asiento-

- Voy a ir directo al grano, Justin- comienza- desde hace un tiempo la policía esta detrás de Martín. Él esta comenzando a ser un verdadero fastidio para nosotros, sabemos que esta manteniendo contacto con un gran mafioso, tenemos que pararlo.

- Y…

- Sabemos que es tu tío y…

- Que sea mi tío no quiere decir que yo sepa en que anda metido- digo queriendo sonar sincero y ofendido-

- No me quieras ver la cara, Bieber- dice poniéndose serio- sé que tú, desde los casi 17 años has estado con él en sus negocios, él te “apadrinó”. Sé cada negocio que has hecho, sé que no has hecho, sé todo de Martín y en consecuencia de su entorno. Y tú has estado muy cerca de él en los últimos dos años- dice mirándome a los ojos y no aparto la vista en ningún momento- pero no estoy aquí para meterte en problemas. Este caso es mío, es importante. Y por eso, he venido a buscarte.

- Sigo sin entender…

- Quiero que colabores conmigo, Justin. Sé que te has salido de los negocios de Martín por…- dice y mira hacia la habitación donde esta _____ y me tenso- tu chica, supongo. Tus razones no la se, pero las celebro. Eso no quita el echo de que hiciste ciertas cosas ilegales y condenadas por la ley. Pero, vengo a ofrecerte la oportunidad de colaborarme.

- ¿Y que gano yo?

- Ganas tu libertad- se limita a decir-

- Usted me cree idiota de verdad- afirmo sonriendo con cinismo mientras niego con la cabeza- yo sé que no tiene pruebas reales que puedan hacer que yo caiga en la cárcel. Sé que quiere que le ayude a joder a Martín, pero de paso… me jode a mi también.

- No, Justin. Estas equivocado conmigo. Tengo buenas influencias, es cierto que, aunque tú no lo creas, nosotros sabemos de ti, sabemos de Roberto también, de todos los que trabajan para Martín. Si me da la gana ahora mismo puedo llevarte a comisaría. Pero no es lo que deseo realmente. Creo que me sirves mucho más fuera.

- Sigo sin ver que es lo que gano.- digo comenzando a irritarme-

- Tarde o temprano, tendremos a Martín y a los suyos. Incluido tú. Pero si nos ayudas, nosotros podemos ayudarte a ti.

- No tengo problemas con la policía, así que…

- Justin, nosotros siempre hemos estado aquí, aunque tú no nos veas. Créeme. Colabora en atrapar a Martín y yo podré hacer que te pongan una fianza o libertad vigilada y…

- Ya va, espera- digo en estado de shock- ¿Qué mierda significa todo esto? Estoy tan tranquilo en mi casa y aparece un policía hablándome de que si ayudo no caigo en la cárcel, ¿en que puto momento si quiera yo he estado en riesgo de caer preso?

- En muchos, Justin. Pero sabemos hacer las cosas, esperar el momento justo.

- Y este es- termino por él, aún asimilando todo lo que esta pasando- ¿y por que yo?

- Justin… la gente que se mete a esto, normalmente lo hacen por necesidades, por vanidad, gente sin miedos, sin escrúpulos. Que no les importa pegar un tiro a alguien, violarlos, secuestrar. Y aunque si es cierto que muchos intentan salir nunca lo logran, tú sigues metido por más que lo quieras negar, lo sabes. Yo puedo ayudarte y tú a mi. Sé que tú no eres como ellos, no has matado, no has violado o secuestrado, no al menos del todo, por supuesto eres cómplice una vez que sabes que la gente con la que trabajas y para los que trabajas lo hacen, pero no lo has hecho tú directamente. Si, sé que has tenido fuertes peleas, algún enfrentamiento con la policía, venta de drogas, distribuirla, te has visto con gente que sabe de esto. Pero no eres tan desgraciado como ellos. Sé que nadie más que tú no me ayudaría y te conviene.

- ¿Por qué estas tan seguro que yo te puedo ayudar?

- Porque, tú tienes valores y cosas por la que luchar y estar libre y ellos no.

- ¿Ah si?- digo bufando- ¿Cómo qué?
En ese justo momento sale algo aturdida _______ que me mira avergonzada y poniéndose la otra sandalia, se acerca a mí y me levanto evitando hacer una mueca por mis dolores y moretones de los que por cierto el policía no ha hecho comentarios ni ha reparado mucho en ello.
 
- Justin, me tengo que ir- yo la miro confuso- José esta enfadado, me dio un poco de tiempo para venir a verte y mira la hora que es, yo… tendría que estar trabajando ahora- dice nerviosa-

- Esta bien- digo confuso, ella se acerca a mi y me da un beso- cuando vuelvas hablamos de ese trabajo tuyo- digo algo serio, ella se sonroja pues casi parezco su padre y mira al policía que ve nuestra escena en silencio-

- Vale, cualquier cosa…- dice con desconfianza por él, le sonrío para quitarle importancia-

- Cuídate, te quiero- susurro dándole un beso en la cabeza con la intención que solo ella me escuche-

- Y yo- y sale rápidamente de casa, yo me doy la vuelta y veo al policía, Hugo creo que se llama, mirarme atentamente mientras sonríe a medias.-

- Ya tengo la primera razón por la que tú lucharías.
Y aunque es cierto. Querer manipularme metiéndola a ella no es buen comienzo.

 

                      Cαριтυlσ Cυαяєnтα&Cuatro
_______ ~
 
 
- ¿Dónde demonios estabas? - me grita Ana muy molesta, la miro sorprendida-

- Estaba con Justin es que…

- ¡¿Qué?! Maldita sea, _______. Eres una gilipollas- me insulta, yo la miro alucinando y me enfado de repente-

- Ten cuidado con como me hablas, eh. Yo le pedí permiso a José para irme y…

- Si, pero te di un permiso de unas horas, ___*- interviene José más sereno- ¿has visto la hora? Son las diez de la noche, joder. ¿Sabes todo el lío que hemos tenido? Y a ti se te ocurre venir justo luego de pasado el tiempo de mayor clientela.

- Si, la reina tan inteligente- habla con sarcasmo Ana y la miro molesta-

- Vete a la mierda- le susurro, ella da un paso hacia mi dispuesta a todo pero José interviene-

- Ya esta, no os vais a pelear por Dios.

- Es que ella… joder, ¡nos dejó todo el trabajo! ¿Qué clase de maldita amiga hace eso?- yo la miro alucinando aún, no conocía ese lado suyo.-

- Lo siento ¿vale?- me disculpo queriendo ponerme en su lugar si me hubiese pasado a mí- pero es que… cuando llegué Justin estaba mal herido, me quede a cuidarlo y se me fue el tiempo, lo siento en serio.

- ¿Cómo que mal herido?- pregunta José sin embargo Ana rueda los ojos-

- Si, larga historia- digo haciendo una mueca- ahora esta mejor.

- Bueno, en todo caso podías haber avisado ¿sabes? En los tiempos que corren el móvil para algo esta- me regaña sin querer sonar muy duro-

- Lo se- digo y hago un puchero tierno-

- Bueno… esta noche cerramos temprano, tengo una cita con unos amigos- dice guiñándome el ojo y Ana hace un gesto de asco y se va a la cocina- esta muy cabreada.

- Lo se, no era mi intención.

- Bueno linda, tú sabes que mi deber es quitarte del sueldo este día no trabajado eh.

- Lo se- digo y suspiro pesadamente- pero ahora mismo me pongo a trabajar.
Él asiente y se va, mirando a mi alrededor veo que no hay mucha gente, haciendo una mueca voy a la cocina y me preparo para atender a cualquier persona que me necesite, Ana me mira fumando un cigarrillo con odio, sí, nunca creí que me daría esta mirada.
 
- Oye… dije que lo siento.

- Lo se- se limita a decir-

- Yo… esta misma noche me voy de tu casa, bueno, no tengo nada allí excepto unas bragas- digo esperando hacerla reír, carraspeo al ver que se queda igual- así que iré a por ellas luego y… o bueno, mejor tíralas- rectifico al ver su cara de desagrado al escuchar que volvería a su casa- no me hacen falta. Yo… gracias por haberme dejado quedarme en tu casa.

- De nada- se limita a decir, me doy media vuelta para irme pero ella me detiene- oye, ¿volviste con Justin, no?

- Si, hablamos y estamos bien.

- Me alegro- dice seca-
Salgo de allí confusa y me quedo en la barra mirando a los clientes, entonces veo que en una mesa esta Daniel. Joder, ¡Daniel! ¿Hace cuanto ni le veo? Ni siquiera me acordaba de él y ese pensamiento me hace sentir algo culpable, recuerdo que la última vez que le vi fue después de aquel fatal botellón, en el que por primera vez mantuvo una conversación normal con Justin sin comenzar a matarse, aunque Justin seguía mirándole con cautela y vigilando cada paso que él daba, dispuesto a caerle encima si él me tocaba. Me reí tanto por sus celos.
 
- ¡Daniel!- le saludo acercándome, él me mira sorprendido-

- ¡__*! Estabas perdida- se levanta y me saluda con dos besos- ¿Cómo estas?

- Pues aquí, ya ves- digo mirando a mi alrededor- sabiendo lo que es trabajar.

- Guau, así que madurando- él se burla y le pego en el hombro-

- ¿Cómo has estado?

- Muy bien, ¿sabes? He conseguido plaza en Grado Superior- dice orgulloso-

- ¡Genial! ¿Es lo que querías, no?

- Si, estoy muy contento. Además, ya en dos días vuelve Lorena.

- ¿Ah si? No tenía ni idea.

- No me extraña. Me ha dicho que te ha sentido muy lejana estos días que ha conseguido hablar contigo, incluso me pidió buscarte, pero ya sabes… no me gusta meterte en líos de chicas- yo hago una mueca-

- No hay ningún lío. Si es cierto que no he estado como antes, pero es que muchas cosas han cambiado ¿sabes? Y… bueno, yo la quiero. Y a Marta y Mónica también. Pero no se- digo encogiéndome de hombros- no ha sido intencional.

- Tendrás que recompensarlas cuando vuelvan- dice sonriente-

- Lo se, hay mis locas- digo suspirando con nostalgia-

- ¿Y que tal te va con Justin?

- Me va genial, estamos bien… algunos discusiones pero estamos aprendiendo a llevarlo.

- Me alegro- dice sincero y le miro sorprendida- hablo en serio, oye… ese chico ha demostrado que te quiere realmente. Romperme la cara tantas veces no es normal- dice bromeando y yo río-

- Fue malo contigo pero…

- Esta en el pasado. Lo superé.

- Genial- digo riendo- oye, ¿te han atendido ya?

- No, la verdad y muero de hambre.

- Pues pide por esa boquita.

- No se, tráeme algo rico, lo que quieras.
Dudando un poco termino por irme a la cocina y pedirle su plato favorito.

 De lejos veo a Ana hablar por teléfono de forma acalorada y me entra curiosidad de saber con quien pero me contengo y no me acerco.

 Unos veinte minutos después el chef me da el pedido de Daniel y voy a llevárselo.

Él lo mira emocionado y me da las gracias.

Y justo antes de darme la vuelta para ir a atender a otra mesa, me siento decaer, sin nada de fuerzas y mareada.

Mi vista se nubla y lo último que siento son los brazos de Daniel cogiéndome y un pequeño murmullo a mi alrededor.

Justin ~
 
Roberto me mira incrédulo con todo lo que le acabo de contar, sin terminar de creérselo.
 
Cuando termino de contarle cada detalle de la conversación él se queda con la vista fija en un sitio, yo me enciendo un cigarrillo dándole su tiempo y cuando voy por la mitad le escucho hablar.
 
- Guau- yo ruedo los ojos-

- Te has tomado medio siglo solo para decir eso- digo negando mientras sonrío-

- Es que… joder, Justin. Esto es algo que hay que pensar mucho. ¿Hace cuanto se fue el tipo ese?

- Hará una media hora, justo después de irse llegaste tú.

- Pf, mira que le dije a ___* que cuando se fuese me llamara.

- Bueno, ella tuvo que ir al bendito trabajo ese que se le antojó hacer ahora.

- Déjala… ya se aburrirá- yo solo asiento- oye, ¿lo has pensando bien, verdad? Quiero decir, ¿estas seguro de rechazar lo que te ofrece?

- Si, Roberto. Mira, no sé si ese hombre de verdad es sincero, no lo se. Le dije que no, que no me interesa ayudarle. Quiero decir, joder, Martín me quiere obligar a meterme en ese negocio, y ahora aparece un policía pidiéndome que lo haga, que acepte, que quiere que este dentro para que le haga de topo y le cuente cada paso que dan. No lo se, puedo terminar mal.

- Si pero, ¿no has pensado que elijas lo que elijas puedes terminar mal? Quiero decir, si te pones del lado de Martín estas jodido porque la policía lo pillará, y si te pones del lado de la poli, también saldrás medio embarrado porque tendrás que ser juzgado por lo que has hecho antes. Pero, en cierta forma saldrás un poco mejor, porque ellos te darían menos años por ayudarlos. - yo resoplo sabiendo que tiene toda la razón-

- Si, lo se. Pero… no quiero y punto.

- Entonces yo te tengo una idea- yo le miro poniendo atención- irnos.

- ¿Qué?

- Si, irnos lejos de aquí Justin. Por lo que me cuentas, yo también estoy jodido, mierda tengo mucho que ver con Martín y no quiero caer preso. Hay que irse, Justin. Antes de que toda esta mierda explota.
Me quedo callado. ¿Irnos? No podría ser mala idea pero ¿huir? Yo no huyo.

Joder, ¿Qué demonios debo hacer? Si la policía quiere cogerme lo hará este donde este, no quiero pasarme la vida huyendo de ellos y de Martín. Y además, no quiero dejar a _______ sola o tener que llevármela a pasar de todo conmigo, huyendo como si hubiese hecho algo. No quiero eso para ella, ni para mi. Ni siquiera para Roberto.
 
-¿En serio crees que ganaremos algo con eso?

- Bueno, no lo se. Yo… joder, soy un camello de bajo rango pero seguro que mi añito me cae en la cárcel si me pillan, no quiero riesgos.

- Es duro, pero tengo que enfrentarme a eso. No se como lo haré, pero debo hacerlo.

- Supongo que- suspiro pesadamente- te acompañaré. Haremos esto juntos- dice seguro y sonrío a medias-

- Genial, debemos…- me interrumpo al escuchar mi móvil sonar, me acerco y lo cojo y veo un numero desconocido, con cierta desconfianza lo cojo-

- ¿Si?

- ¿Justin, eres tú?- escucho la voz familiar, dudando de si de verdad es Daniel-

- Si, ¿Quién eres?

- Soy Daniel, se trata de __*- dice nervioso-

- ¿Qué pasa con ella?- pregunto preocupado y Roberto me mira frunciendo el ceño-

- Ella se desmayó, no se que le pasa. Estamos de camino al hospital y…

- ¿En que hospital?

- Vamos al Gregorio Marañón, estamos llegando…

- Voy para allá ahora mismo- digo preocupado y cuelgo.-
Maldita sea. ¿Qué le pasa? No es normal, no es la primera vez y no me gusta eso. No quiero pensar, pero… joder.

Levantándome y pidiéndole a Roberto que me lleve en su moto al hospital- pues he perdido la mía por culpa de esos imbéciles que trabajan para Martín- intento mantener la calma. Solo espero que este bien.
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¡Lo sieeento! ¡Lo siento mil veces por estar desaparecida!
He tenido un finde un poco ocupado, bueno, demasiado ocupado... de verdad lo siento babys, espero que no me matéis.
Bueno, quiero deciros que solo me han llegado dos fotos... y que si de verdad no me vais a pasar la foto, no vale la pena hacer nada, a si que... vosotras veréis.
Bueno, 6 comentarios y subo el siguiente.
Os quiero, peace.